El Conil no pudo hacer buena ante el Bollullos la condición de local y el gran balance de resultados que registra en el Municipal Pérez Ureba, en donde cedió un empate que no le permite progresar en la búsqueda de los puestos de play-off de ascenso -de hecho cede la sexta plaza al Gerena- aunque le mantiene en la pomada y, lo más importante, conserva la ventaja de tres puntos sobre un rival directo.

Como era previsible, el equipo jandeño saltó al verde con las ideas claras en cuanto a la ambición mostrada. Sin embargo, desde los compases iniciales se pudo comprobar que el conjunto visitante había viajado con la lección muy aprendida en cuanto al planteamiento defensivo, el sacrificio colectivo para sumar algo positivo del desplazamiento.

Así, pese a que el dominio territorial correspondió casi por completo a los pupilos de Jesule, lo cierto es que las ocasiones claras de verdad brillaron por su ausencia y el ataque amarillo se limitó a centros y balones bombeados desde la zona ancha al área que pocas veces se tradujeron en remates entre los tres palos.

La tónica hasta el descanso no varió a la vuelta del vestuario, más allá del previsible paso al frente de los conileños. El movimiento de fichas en el banquillo tampoco se tradujo en un incremento de las opciones porque el Bollullos nunca perdió la compostura y con el paso de los minutos se creció al ver muy cerca el punto que venía buscando.

El Conil lo intentó hasta el final, sin locuras ni dejando al adversario una autopista hacia su portería, y en la penúltima acción del tiempo añadido, ya en el minuto 95, gozó posiblemente de la mejor ocasión del encuentro en un balón al interior del área que se disponía a rematar Cuervi, con todo a favor para marcar, cuando un defensa visitante se lo rebañó mandando a córner.