La festividad de Nuestra Señora de los Remedios, Patrona de la ciudad, se desarrolló un año más en compañía de cientos de personas que acudieron ayer a esta ineludible cita religiosa. De esta manera, desde primeras horas de la mañana se llevó a cabo el Rosario de la Aurora al que asistieron los incondicionales fieles a la Virgen, para luego pasar a una misa cantada que sirvió de preludio de todos los actos conmemorativos que tuvieron lugar a lo largo del día de ayer.

En este sentido, a las once de la mañana dio comienzo en la iglesia de la Santísima Trinidad (San Telmo) la función principal de los cultos que estuvo presidida por el obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza. El templo se llenó de público durante esta ceremonia religiosa que contó con la agrupación Coral Virgen de los Remedios.

Mientras, en la calle La Plaza se agolpaban cientos de personas tanto de pie como sentadas en un pequeño tramo de carrera oficial instalado para las celebraciones patronales.

Tras la misa oficiada por el obispo sonó en la calle la música de la Banda Municipal Maestro Enrique Montero, agrupación que amenizó en todo momento la tradicional ofrenda floral frente al mosaico de la Patrona en la fachada de la iglesia de San Telmo, un acto que año tras año organiza la Peña de Costaleros Nazarena

Las primeras ofrendas a la Virgen fueron un cesto pan, racimos de uva y dos palomas, que simbolizaban el trabajo, la cultura vitivinícola de la localidad y la concordia, respectivamente.

Seguidamente, el alcalde, Ernesto Marín, en compañía de Rafael Zornoza y otras autoridades civiles y militares depositaron los primeros ramos de flores en la estructura colocada en la fachada para la ocasión.

Tras ello, representantes de las cofradías, agrupaciones parroquiales, de la Corporación Municipal, colectivos, particulares y asociaciones vecinales dejaron sus ramos de flores junto al mosaico. Incluso la ofrenda contó con la participación de coches clásicos que dio aún más vistosidad a este encuentro religioso.

También hubo un momento de recuerdo al padre agustino Sixto Calvo Hernández, quien falleció recientemente a los 83 años y al que el Ayuntamiento dedicará una calle de la ciudad por su inestimable labor durante más de veinte años en favor de los más necesitados.

Además, al igual que otro años estuvieron presentes los caballos y jinetes ataviados con el traje típico que dieron colorido al acto con su ofrenda floral y que fue muy aplaudido por el numeroso público que se congregó en la calle La Plaza.

Mientras tanto, en las calles aledañas se apreciaba un buen ambiente de familias con sus pequeños para disfrutar de la festividad de Nuestra Señora de los Remedios.

Cabe destacar que la buena climatología contribuyó a que el público saliera a la calle para vivir una de las fechas más señaladas de la localidad. Aunque la mañana comenzó algo nublada, conforme llegaba el mediodía el sol hizo acto de presencia con fuerza y lució con intensidad.

No obstante, el momento cumbre de la jornada de ayer tuvo lugar a partir de la tarde noche con el desfile procesional de la Patrona por calles del centro de la ciudad. Así, a las ocho y media de la tarde se iniciaba el itinerario desde la iglesia de San Telmo en cuyos alrededores ya se agolpaban cientos de personas para ver los primeros pasos de este cortejo que se encaminó hacia la calle La Plaza para luego recorrer las calles Joaquín Santos, Constitución, Álamo, Plazoleta Patiño, Corredera Baja, La Vega, Segismundo Moret, Laja, La Fuente, Alameda, y nuevamente La Plaza para su recogida, instante en el que se entonó la Salve Solemne.

La procesión contó con una amplia presencia de devotos que rindieron homenaje a la Virgen de Nuestra Señora de los Remedios, así como de representantes de las hermandades y cofradías de la ciudad, además de representaciones civiles y eclesiásticas.

Por otro lado, durante el trayecto procesional mucha gente se congregó en zonas estratégicas del recorrido para observar de cerca a la Patrona, que ofreció inolvidable imágenes a los asistentes en determinados lugares de su itinerario, sobre todo en las calles más estrechas.

De igual modo, el centro gozó de un extraordinario ambiente que se alargó hasta bien entrada la noche y que no acabó hasta poco después de la llegada de la Virgen a su templo.

Así, los eventos en torno a la Patrona finalizaron tras una extensa programación organizada por la Hermandad de Nuestra Señora de los Remedios que dio comienzo el pasado 30 de agosto con la Solemne Novena para continuar en días posteriores con una exposición del XII Certamen de Fotografía La Iglesia Mayor, la conferencia de Jesús Romero Montalbán con motivo del Bicentenario de la iglesia San Juan Bautista o la Gran Filetada Popular. Sin embargo, los principales actos se desarrollaron entre ayer y el pasado domingo, jornada esta última que también atrajo a cientos personas con motivo de la pisa de la uva y la bendición del primer mosto de la vendimia.