Con algo más de público que en la noche del viernes, cuando más de doscientas personas se acercaron hasta Las Albinas para disfrutar con la música de La Musgaña y Nganga Project, el FIMEC, su XIII edición, vivió ayer otra intensa y última jornada de música, baile, talleres, circo y artesanía.

Una jornada que arrancó con el protagonismo de los talleres, a los que, pese al rigor de las altas temperaturas, se acercaron un buen número de personas, y que, conforme entraba la noche, trasladó todo su interés al escenario. Unas tablas en las que, según apuntaba a este medio el director del FIMEC, Andrea Morpurgo, se disfrutaba al cierre de esta edición con la esencia de este festival, la fusión de las músicas.

Una fusión que corrió por cuenta de Simao Félix y Djiby Cissoko. "Si hay algo que diferencia a festivales como el FIMEC de otros muchos es la posibilidad de poder disfrutar en un mismo espacio y en plena fusión de las músicas de grupos y músicos diferentes". "Sin lugar a dudas", añadió Morpurgo, "es un momento de enorme gozo para todos aquellos que bucean continuamente en la música, más allá de la comercial".

Apuntar, que en la madrugada del viernes, cuando se dio cuenta a los presentes de la actuación de la Guardia Civil en la sede de la SGAE, estos irrumpieron en un gran aplauso, a los que se sumaron los propios de los responsables del FIMEC, según apuntó Morpurgo.