El ya ex entrenador del Cádiz, Javier Gracia, que fue cesado ayer, tras la derrota de los andaluces (4-1) frente a la Real Sociedad, aseguró hoy que acepta su "responsabilidad" por la mala marcha del equipo, situado en puestos de descenso a la Segunda División B, "ya que no se ha sacado el máximo rendimiento", aunque, precisó, que ha intentado "dar lo máximo para que todo fuera bien".

El técnico, que acudió a la ciudad deportiva cadista para despedirse de los jugadores, hizo balance de su estancia en el banquillo gaditano. "Parece que fue ayer cuando llegué y estos 18 meses han pasado rápido. La temporada pasada todo fue bien y logramos los objetivos y en esta etapa los resultado no se han dado", dijo.

Gracia agradeció a los aficionados el "trato, respeto y comprensión" que le ha brindado durante todo este tiempo. "Al igual que agradezco a los empleados del club, colaboradores y jugadores su trabajo, que son grandes profesionales y les tengo todo el respeto", afirmó.

Por último, el navarro deseó suerte al club para el futuro, al tiempo que dijo sentirse "orgulloso de haber entrenado" a la escuadra andaluza. "Le deseo mucha suerte al equipo para que las cosas vayan bien. Estoy y estaré orgulloso de haber entrenado al Cádiz", explicó.

El sustituto de Gracia será Víctor Espárrago, que todavía no tiene confirmada fecha de llegada a la capital gaditana y que cumplirá, con ésta, su tercera etapa al frente del vestuario amarillo.