El Atlético de Madrid volverá a disputar, un año más, el Trofeo Carranza. Los pupilos del Cholo Simeone regresarán a la Tacita con nuevas caras y la misma ilusión de cada temporada. Gaitán, Vrsaljko y Gameiro añaden más calidad a una plantilla envidiada por media Europa. Cerezo se ha propuesto ganar la Liga de Campeones, y parece que volverá a tener serias opciones.

El futbolista francés hará su debut con su nuevo equipo en el evento gaditano y apunta a titular en el once que salga a jugar contra los hombres de Álvaro Cervera.

Los jugadores colchoneros recién llegados ya han tenido tiempo de sobra para ver cómo se las gasta su nuevo técnico. Estar en el Atlético requiere intensidad, incluso para jugar un trofeo veraniego, por lo que el equipo rojiblanco se empleará a fondo tanto ante el Cádiz como en una hipotética final.

El Trofeo Carranza servirá como cierre a la pretemporada del equipo de Simeone, que ya no jugará más amistosos este verano.

Tras la celebración de los dos partidos en Cádiz, los hombres de Simeone continuarán preparando en Majadahonda una campaña que esperan acabar en Neptuno festejando la consecución de alguno de los tres títulos a los que aspiran.

De esta forma, el doble subcampeón de Europa en los tres últimos años visitará de nuevo el coliseo gaditano con el objetivo de comenzar la competición oficial en plenas garantías en un año que vuelve a ser exigente por las altas aspiraciones de la entidad del Manzanares.

Los aficionados rojiblancos ansían reinar en Europa en la misma temporada en la que se despedirán de un estadio que, sobre todo en los últimos años, ha visto como su equipo vencía prácticamente a cada rival que le tocaba recibir.

Cerezo, que no oculta en ningún momento su ambición por todas las competiciones, declaró que "esta plantilla es la más potente de los últimos años". Sobre el papel, no le falta razón. Se tendrá que corroborar en el campo.