El adversario que hoy se mide al Cádiz comparte algo más que el objetivo de volver a Segunda División A. Y es que esta temporada es el Cartagena más cadista que se recuerda. Tres de los jugadores que componen la plantilla del conjunto murciano militaron la pasada campaña en la escuadra amarilla: Ceballos, Jorge Luque y Gato. No es casualidad. El que fue presidente del Cádiz entre el curso 2012/13 y buena parte del 2013/14, el cartagenero Florentino Manzano, se ha erigido esta campaña en el hombre fuerte del club de su ciudad pero en la sombra, sin ningún cargo oficial. De hecho, él fue el encargado de confeccionar el plantel y de ahí la presencia de un trío de futbolistas con los que coincidió en la entidad cadista.

Destaca además la presencia en las filas del Cartagena del preparador físico Miguel Cuesta Rodríguez, gaditano que ejerció en lacantera cadista e hijo del ex consejero Miguel Cuesta.

Manzano reactivó su presencia en el mundo del fútbol, del que se había alejado tras haber fundado el actual Cartagena, con su llegada a la presidencia del Cádiz de la mano de Sinergy y, en concreto, de Alessandro Gaucci. Su paso no resultó afortunado por la falta de inversión de los entonces propietarios en un club abocado a la desaparición si no entraba dinero. Poco margen de actuación tuvo sin el apoyo de Sinergy. De vuelta a su tierra, el empresario se metió de lleno en el Cartagena pero siempre en la sombra. Con él llegaron el pasado verano Ceballos, Jorge Luque y Gato. El lateral derecho iniciaba su segunda etapa tras una temporada en el Cádiz.

Jorge Luque llegó a mediados del ejercicio 2012/13 y jugó vestido de amarillo y azul hasta el final de la pasada campaña. Centrocampista de corte ofensivo y especialista en el lanzamiento a balón parado, este curso se echa en falta a alguien se características similares en el plantel cadista. Gato fue el que menos tiempo permaneció en el Cádiz. El extremo llegó en la 2013/14 pero salió en el mercado de invierno después de desempeñar un papel secundario como suplente. Pese a no disponer de demasiados minutos, el granadino tuvo tiempo para marcar cuatro goles antes de ser cortado en enero y firmar por el Lucena.