El Cádiz regresó ayer a los entrenamientos con la novedad de la incorporación al grupo de Sergio Aragoneses, apartado de la actividad en las últimas tres jornadas por una contractura muscular de la que ya se ha recuperado. El portero se ejercitó con normalidad, se estiró sin reparos para hacer paradas y de las sensaciones que tenga durante la semana dependerá si puede estar o no disponible para el decisivo encuentro contra el Cacereño. Si durante estos días se entrena como ayer, no es descartable es que entre en la lista de convocados.

En el caso de que el cancerbero habitualmente titular no pueda ponerse los guantes en el Príncipe Felipe, será Ricardo Alonso el que de nuevo se encargue de defender el arco del equipo amarillo. Dejar la portería a cero en la ciudad extremeña supondría acceder de manera automática a la fase de ascenso.

Otra de las novedades en la vuelta al tajo fue la presencia de Albert Dalmau, activo tras superar unas molestias en una de sus rodillas.

No trabajó con el grupo Andrés Sánchez debido a la sobrecarga muscular que ya le obligó a abandonar el terreno de juego en la segunda parte del partido contra La Roda. El descanso del lateral izquierdo murciano fue por precaución y si no surgen inconvenientes formará parte de la expedición cadista el próximo fin de semana.

Mientras, Jon Ander Garrido se retiró a mitad de la sesión para tratarse aparte del esguince de tobillo que sufrió la semana pasada, aunque no es nada grave y lo normal es que también pueda estar disponible para el importante duelo del domingo en Cáceres.

Juan Villar se marchó un poco antes pero en principio tampoco debe tener problemas para viajar a tierras extremeñas.

El único jugador que está descartado para Cáceres -y lo que queda de temporada- es tomás, que en próximas fechas será operado de la rodilla con la vista puesta ya en la próxima campaña. Mala suerte la del canterano, que ha vivido un curso para olvidar marcado por las lesiones en las dos rodillas que le han impedido ayudar al equipo. Sólo participó en dos partidos tras la primera intervención quirúrgica, pero no llegó a coger la forma y después aparecieron molestias en la otra rodilla que terminaron de fastidiar la totalidad de la temporada al lateral zurdo.