El gestor deportivo estará presente en el comienzo de la pretemporada

"Al andar se hace camino y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar". Antonio Machado ofrece el prólogo de la nueva historia del Cádiz, un equipo que ha caído en las redes de Quique Pina y que está llamado a borrar la pasada temporada y a cerrar la primera posición del grupo IV de Segunda B en el inminente curso liguero para facilitarse el obligado, ansiado y soñado regreso al fútbol profesional.

Y como de profesionales se trata la cosa, Quique Pina, nuevo gestor deportivo del club amarillo junto a su inseparable Juan Carlos Cordero, estará hoy presente en el inicio de la pretemporada de los amarillos. Al murciano se le presenta mucho trabajo en la jornada del jueves 14 de julio. Por un lado tendrá que atender a jugadores que quieren hablar con él, casos de Cifuentes o Raúl López. También tendrá asuntos que tratar con el cuerpo técnico que lidera Jose González. Y, posiblemente, presentará ante los medios de comunicación tanto a Héctor Yuste como a Pedro Barrancos, dos futbolistas que llegan al Cádiz por su obra y gracia a través de la hermana Granada. En fin, un buen número de compromisos y actos protocolarios que no acabarán hasta que el sol, valiente revolucionario, sea vencido por la apacible luna.

La plantilla y el cuerpo técnico del Cádiz se han citado a las nueve de la mañana en las instalaciones del estadio Ramón de Carranza. Por eso, ayer, podía verse al utilero del club, Juanito Marchante, preparando todo lo que hay que preprar para una puesta de largo de un equipo de fútbol. Y del estadio Carranza, a la playa; a la altura del estadio, para ir haciendo el cuerpo a la palabra victoria. Los amarillos realizarán la primera sesión de trabajo sin tacos en las plantas de los pies. Y la imagen será un tanto familiar. Jose González tendrá por un lado las seis caras nuevas que han recalado en el equipo, más el canterano Dieguito. Y por el otro, los ocho jugadores de la pasada temporada que siguen con contrato, aunque no con su futuro en el equipo garantizado. También estará Cifuentes, que defiende lo contrario que el club: que todavía tiene contrato en vigor.