Al Cádiz CF le quedan cuatro sesiones de entrenamiento antes de enfrentarse el próximo lunes (21:00 horas) al Granada en el Nuevo Mirandilla (antiguo Carranza), pero el escenario con los jugadores lesionados parece adverso para pensar en un fin de semana largo con todos disponibles. A los fijos en la enfermería desde el verano, Jon Ander Garrido y José Mari, se han ido uniendo estos días otros efectivos que merman el potencial del equipo y generan una inquietud grande sobre todo en el centro del campo.

Tomás Alarcón se ha perdido los últimos encuentros oficiales y está por ver si su dolencia da para aspirar a que pueda reaparecer ante el Granada. El chileno es de los más castigados entre la participación con su equipo y con el combinado de su país entre minutos de juego y kilómetros de los diferentes desplazamientos al otro lado del 'charco'.

Jens Jonsson arrastra unas molestias que igual requieren de un reposo, si bien habrá que esperar a la evolución del danés en los próximos entrenamientos. Su papel había vuelto a ser relevante en el Cádiz CF al mostrar de nuevo un rendimiento similar al de la pasada temporada, la de su estreno de amarillo.

Iza Carcelén acabó con un problema muscular el choque del pasado domingo en el Martínez Valero. El portuense es de entrada el que tiene lejos reaparecer pronto. Las fibras le pueden haber jugado una mala pasada y todo apunta a que Carlos Akapo asumirá la responsabilidad en su posición.

En cuanto a Salvi Sánchez, un gemelo le trae por la calle de la amargura y este miércoles tampoco pudo ejecutar el trabajo que llevó a cabo el grueso del grupo. El extremo, por sus características, precisa estar al cien por cien para ser de la partida.

Por último, Álex Fernández se retiró nada más comenzar la sesión de este miércoles festivo. El madrileño, protagonista en la derrota de Elche (3-1) por anotar el único tanto del Cádiz CF y por fallar un penalti que era la oportunidad de igualar el primer gol ilicitano, tiene alguna dolencia que le impide trabajar con normalidad.

A esta lista amplia se unen los lesionados de larga duración Garrido y José Mari, que en el caso del primero es aún más complejo porque ni siquiera dispone de licencia para jugar debido a la gravedad de su dolencia desde el pasado verano; un problema que le obligó a ser intervenido.