Verde con matices
El frecuente empleo de la tercera equipación genera opiniones de todo tipo entre la afición
Algunos seguidores ven excesivo su uso y otros no le dan tanta importancia
El uniforme verde predomina en los partidos del Cádiz como visitante. Es un hecho. De sus siete desplazamientos, el equipo empleó la tercera equipación (camiseta, pantalón y medias verdes) en cuatro: en sus últimas tres salidas (Levante, Lugo y Tenerife) y también en la comparecencia en el campo del Reus en la quinat jornada. Usó la segunda vestimenta (azul con rayas amarillas de trazo fino) en el terreno de Rayo Vallecano -no había coincidencia de la primera con el blanco y rojo del cuadro madrileño- y sólo en dos citas fuera de casa (Almería y Miranda de Ebro) se enfundó la primera, la amarilla y azul, con la que siempre juega como anfitrión en el estadio Ramón de Carranza.
Consultado por este periódico, el club explica que cuando el Cádiz viste de verde lejos de su feudo lo hace únicamente para evitar coincidencias de color en alguna de las prendas con el rival, que ejerce de local y tiene preferencia en la elección. Si el adversario lleva algo azul, el Cádiz recurre a la última alternativa. No hay, por tanto, según la entidad cadista, razones comerciales ni obligación con Adidas para promocionar el tercer uniforme, hasta ahora usado más que el primero y el segundo más allá de la frontera gaditana. El hecho de que el Cádiz se valga más del tercer atuendo que del segundo obedece a que este últtimo posee una notable presencia del azul y complica su uso en sustitución del primero.
La frecuente utilización del verde en las visitas genera diversas opiniones entre los aficionados cadistas. Los hay que critican lo que consideran un abuso por su casi permanente empleo. Otros lo asumen con normalidad y no le dan tan importancia. Diario de Cádiz ha preguntado a varios miembros de peñas que han ofrecido su visión personal sobre el verde del Cádiz.
Javier Parra, integrante de la peña Chicharros en amarillo, radicada en Tenerife, presenció en el Heliodoro Rodríguez López el agónico empate del Cádiz ante el conjunto canario. Vio al equipo de sus amores ataviado entero de verde. "El tema del verde lo hemos comentado en la peña", señala antes de dar su opinión: "En casos puntuales se puede entender, otra cosa es que se convierta en una costumbre. De verde no parece que sea el Cádiz. Se pierde la identidad si no se usa la primera equipación". Si el Cádiz no puede vestir de amarillo y azul en las visitas, "tiene más lógica que se use la segunda equipación, no la verde, que no la tiene nadie".
Manuel Moreno, de la peña cadista de Alcalá de los Gazules, no duda en calificar de "horroroso" el tercer atuendo que tanto se ve por televisión. Sin tapujos. "Hay veces que se confunde el césped con los jugadores, Los árbitros deberían exigir que no vistiera todo de verde, que hubiese otro color más para dar más tono y evitar confusiones". Cuando la escuadra gaditana se enfunda el verde "no da la sensación que sea el Cádiz", afirma Moreno, que propone que la vestimenta de reserva "no sea verde, sino toda amarilla". No le gusta ese color para su equipo pese al argumento que el verde está dedicado a la provincia gaditana.
Eduardo Suero, de la peña Usera del colegio Amor, de Cádiz, lo ve de otra manera. "No parece mal que se use la equipación verde", sostiene antes de reconocer que "lo ideal es la amarilla y azul", aunque puntualiza que "si el equipo se viste de verde por algo será". A su juicio, "el marketing es así en el fútbol. Va por modas. El romanticismo hace tiempo que se acabó". Suero dice que "me emociono con el equipo de amarillo y azul, pero hay que ir con los nuevos tiempos. Es bonito que se haga un homenaje a los cadistas de la provincia, que tienen más mérito porque vienen de lejos a ver los partidos. Si el color verde es por esa simbología no lo veo mal".
Francisco Navarrete, de la peña chiclanera Y vuelta la burra al trigo, lo tiene muy claro y apuesta por lo clásico. "Sólo me gusta la equipación amarilla y azul", indica antes de abrirse a otra posibilidad cuando no hay más remedio. "Cuando vemos al equipo de verde hay que conformarse. No parece el Cádiz, pero es lo que vende la firma". Reconoce que cuando ve los partidos por televisión "se mezcla el color del césped y el que llevan puestos los jugadores, aunque se diferencia". Si el equipo prolonga su buena racha está dispuesto a aceptar que vista con la tercera vestimenta. "Si gana que juegue con la verde", finaliza con tono de buen humor.
Antonio Girón, de la peña Enrique Mateos -la decana-, acepta de buen grado el verde de arriba abajo. "No me parece mal. Lo ideal es la camiseta amarilla y el pantalón azul, pero si en algunos partidos van de verde será por algo. Las circunstancias mandan y acepto la decisión que adopte el club". En su opinión, "hay gente que se queja por quejarse". Lo importante es que la equipación "lleve el escudo del Cádiz".
Fernando Arévalo, presidente de la Federación de Peñas, da su opinión personal al respecto. "El atuendo verde no es feo, aunque sí fastidioso con el césped, coinciden los colores y en ocasiones dificulta el seguimiento por televisión". Se muestra comprensivo con la promoción de otras equipaciones, "pero lo mejor es el amarillo y el azul, que son los colores de nuestro equipo". Eso sí prefiere "la verde antes que el Cádiz vaya entero de amarillo".
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