Kike López, entre algodones

Con la reincorporación de Óscar Rubio -jugó 20 minutos el pasado domingo tras dos meses y medio de ausencia-, Claudio Barragán ya disponía de todos los jugadores de la plantilla, pero la inoportuna cartulina amarilla -la quinta de ciclo- que vio Migue García el pasado domingo en Sevilla en el choque contra el Betis B impide al jiennense participar mañana en el duelo contra el Jaén al pesar sobre él el correspondiente partido de sanción.

La baja de Migue García deja al técnico sin 'pleno' para poder confeccionar la lista de convocados y la alineación, aunque podría no ser la única ausencia obligada. Claudio señalaba ayer que Kike López no pudo entrenarse al sufrir unas molestias. De su evolución entre hoy y mañana depende su disponibilidad. Quien si está para competir, siempre que el míster así lo considere, es Tomás. Claudio comentaba sobre el lateral izquierdo que la semana pasada estuvo con gripe, pero para esta jornada ya está disponible.

Como es lógico, el preparador cadista no daba una sola pista ayer sobre el posible once que mañana despliegue sobre el tapete del Carranza. "Lo importante es tener alternativas. Hay donde elegir y me siento afortunado".

Cuerpo técnico y jugadores están citados hoy al último entrenamiento antes del partido que servirá para que el míster tome buena nota y dé un paso más para decidir, si no lo ha hecho ya, quiénes serán los once jugadores que saldrán de inicio en busca de los tres puntos. Salvo sorpresa, no se prevé cambios salvo el obligado por la ausencia de Migue García. Kike Márquez, titular en los partidos anteriores a la visita al Betis B, tiene papeletas para entrar por la banda izquierda del ataque, aunque no es descartable que el técnico desplace a ese costado a Fran Machado para colocar a Airam Cabrera en punta junto a Jona. En ese caso, supondría sacar al granadino de los tres cuartos, zona en que está ofreciendo su mejor versión en lo últimos encuentros. La banda izquierda sería, en principio, la única duda. Lo demás, si funciona, no hay razón aparente para tocarlo.