Claudio en su época ideal

El Cádiz acabó su periplo correspondiente a 2015 con la disputa de la 18ª jornada del grupo IV de Segunda División B, tal como ocurrió en diciembre de 2014 con ocasión de la temporada inmediatamente anterior a la actual. Los amarillos vuelven a estrenar año jugando el último encuentro de la primera vuelta, exactamente igual que 12 meses atrás.

Volviendo la vista al pasado, se comprueba que Claudio Barragán aterrizó en el banquillo cadista para relevar al destituido Antonio Calderón a finales de noviembre de 2014, en vísperas del Cádiz-Lucena de la 15ª jornada. El primer tramo del técnico valenciano resultó bastante fructífero pues se enlazaron tres triunfos desde su llegada al dar cuenta entre el 30 de noviembre y el 13 de diciembre de sus tres primeros rivales: Lucena (3-0), Cartagena (1-3) y Córdoba B (3-0). Pero esa racha se truncó con el tropezón sufrido contra el Villanovense (1-0) en la despedida a aquel año el día 21 de diciembre.

En ese preciso momento se produjo el punto de inflexión que condujo al Cádiz a convertirse de manera incuestionable en campeón del grupo con todas las ventajas, desaprovechadas a posteriori, que eso suponía de cara a la fase de ascenso a la categoría de plata. Ese Cádiz de Claudio encandiló a su afición al obtener a partir de entonces unos números impresionantes que lo catapultaron en primer lugar a la posición de líder y luego a aquilatar una sólida diferencia de puntos sobre todos sus perseguidores.

Entre el 4 de enero y el 8 de marzo, el conjunto amarillo completó algo más de dos meses con una impresionante retahíla de nueve victorias y un empate en los 10 compromisos ligueros cumplimentados. Primero se alinearon siete triunfos consecutivos entre las jornadas 19ª y 25ª, con las siguientes víctimas: Arroyo (4-0), Betis B (0-2), La Roda (0-2), Marbella (5-0), Granada B (0-1), Jaén (1-0) y UCAM Murcia (1-0). Cabe refrescar que el choque contra el Jaén, de la 21ª jornada, fue aplazado en su fecha original y acabó celebrándose tres semanas más tarde como el 24º en el orden de la campaña. Aquel mes de febrero se cerró el día 22 con una igualada (2-2) en campo de La Hoya Lorca, pero eso solo significó una interrupción momentánea de la fenomenal serie de victorias ya que los dos compromisos siguientes volvieron a deparar otros dos nuevos éxitos que añadir a la prolongada cadena. Se batió, ya a principios de marzo, tanto al Melilla (2-0) como al Cacereño (0-3), completándose de ese modo una envidiable cosecha de 28 puntos de 30 posibles. ¡Toma del frasco, Carrasco! Ahí quedó la cosa porque el 15 de marzo, en una aciaga matinal en el Carranza, el todopoderoso y embaladísimo equipo cadista inclinó la rodilla (0-2) ante el Sevilla Atlético.

Un vistazo a las dos clasificaciones de la temporada 2014/15 que aparecen junto a esta información, la primera de ellas era la existente después de la 18ª jornada y la otra la posterior a la 28ª jornada una vez culminada la impresionante racha de los amarillos, permite comprobar el enorme cambio producido. El Cádiz había pasado a poseer de 31 a 59 puntos en tan solo una decena de jornadas, lo cual había propiciado una variación de grandes dimensiones en la tabla. De marchar segundo, a tres puntos del líder UCAM, se había colocado en cabeza con seis de ventaja sobre los propios murcianos. Para más inri, dimensiones descomunales presentaba la distancia respecto al tercero, 13 puntos sobre el Almería B cuando 10 jornadas antes solo era de un punto al Jaén.

Con Claudio Barragán bastante discutido, el técnico valenciano tiene ahora la oportunidad de demostrar que su época predilecta es la que comprende los meses de enero, febrero y comienzos de marzo, justo la que se inicia con la última jornada de la primera vuelta. Esa esperanzadora etapa empieza mañana ante el Jaén.