El Cádiz CF no sólo no termina de arrancar el motor en la temporada 2021/22 sino que además está a un pequeño paso de caer a la zona de descenso arrastrado por una dinámica negativa corroborada con la derrota en casa (0-2) sufrida frente al Deportivo Alavés el sábado 23 de octubre.

El varapalo ante un rival directo en la pelea por la permanencia coloca al conjunto amarillo en una situación bastante incómoda no sólo por su ubicación en la clasificación sino por la sensación de que no da para más.

Sus prestaciones apenas le dan para avanzar y además da oxígeno al que tiene enfrente. El cuadro vitoriano, uno de los pocos que van por debajo del Cádiz CF en la tabla, no había puntuado ni marcado un gol a domicilio esta campaña hasta que se presentó en el antiguo Carranza.

Las cuentas para la salvación no salen a día de hoy ni por asomo. Transcurrido el ecuador de la primera vuelta, también el primer cuarto del campeonato, los siete puntos que lleva el equipo son del todo insuficientes para poder luchar con garantías por la continuidad en la élite. El sufrimiento está asegurado.

El único asidero al que puede agarrarse el Cádiz CF ahora más es que haya tres adversarios con un balance más bajo. Eso supone depender de los demás más que de uno mismo. Urge un giro en las próximas fechas. Se trata de ganar, algo que sólo ha conseguido una vez (en el terreno del Celta de Vigo en el quinto capítulo).

En cualquier caso, justo en este momento de la Liga, la realidad es que el conjunto de Álvaro Cervera se ha dejado en el camino nada menos que 23 puntos de 30 y con los siete que acredita ofrece una proyección de 14 al final de la primera vuelta y 28 en el epílogo del curso.

Esas cifras se quedan cortas en la pugna por abrazar el objetivo. Serían del todo insuficientes para renovar la estancia en la máxima categoría. La permanencia suele estar en torno a los 40 puntos. El pasado ejercicio 2020/21, por ejemplo, al Elche le bastaron 36 para quedarse en Primera.

Los números no engañan. Todo lo contrario. Son el espejo de la trayectoria del equipo y el aviso de la necesidad de una pronta reacción antes de que sea demasiado tarde. Sin en lugar de siete puntos llevase diez u once, los amarillos estarían en el promedio necesario para terminar la Liga con 40 o cerca de ese número que podría valer para atar la salvación.

Pero el Cádiz CF se complica la vida en exceso y se mete un laberinto para el que busca una salida en forma de puntos.