La pérgola de Santa Bárbara tendrá el doble de locales tras la rehabilitación

El proyecto diseñado por el Ayuntamiento ampliará la superficie útil de la planta baja más allá de los 1.100 metros cuadrados, con media docena de dependencias disponibles

Habrá pequeños cambios

Estado en el que quedó la Pérgola tras el incendio. / Julio González

El Ayuntamiento se ha propuesto devolver la pérgola de Santa Bárbara a su estado original. Y, más allá de eso, darle una vida que no logró tener en la que puede considerarse su primera etapa (desde su inauguración, dos meses antes de las elecciones que acabaron con la etapa de Teófila Martínez, hasta el primer incendio de julio de 2020). Para ello ha diseñado un proyecto que al mismo tiempo que repara la totalidad de esta polémica construcción va a ampliar el espacio disponible para usos varios en la planta baja. Más que ampliar, a duplicar.

Los bajos de la pérgola pasarán de tener tres locales disponibles para múltiples posibilidades a contar con seis locales. Y en metros cuadrados, pasará de los 513 que existían hasta ahora a los 1.148 que sumará el suelo disponible cuando concluya la obra que en los próximos días va a salir a licitación. Es decir, que se ganan 635 metros cuadrados de superficie en los bajos de la pérgola.

Los locales ya existentes son uno de 196 metros cuadrados junto al paseo Carlos III, otro de 130 metros cuadrados hacia la mitad de la pérgola, y el tercero de 186 metros cuadrados. Los nuevos, por su parte, tendrán 408 metros cuadrados (siendo el espacio de mayor superficie que haya en estos bajos de la pérgola), otro de 107 metros cuadrados y el último, al final de la pérgola, de 120 metros cuadrados.

Las obras

Estos nuevos espacios serán resultado de la intervención proyectada por los técnicos municipales, que al igual que hacían los de Medio Ambiente en el año 2020 aseguran que este edificio “requiere de una actuación urgente de reparación del edificio que integre la reposición de los elementos dañados por el fuego, así como la transformación de alguno de los elementos que configuran su fachada”.

Las obras a ejecutar las divide el Ayuntamiento en varios bloques relacionados con sus orígenes o motivaciones. De un lado, las dos zonas afectadas por incendios, ambas próximas al módulo de aseos, ya que como explica el informe técnico al que ha tenido acceso este periódico “el fuego afectó principalmente a la fachada de policarbonato celular”, un material que “se funde rápidamente y no llega a afectar a la estructura auxiliar, por lo que el daño no fue mayor", salvándose también la estructura principal del edificio.

Para estos daños del fuego, se plantea la limpieza general de la zona afectada, la eliminación de los elementos de fachada adheridos a la estructura auxiliar, retirando los que se encuentren afectados por el fuego, deteriorados o pintados con graffitis; el montaje de los elementos de metacrilato de colores en la fachada; y la reposición de las placas de yeso y repintado de la zona interior.

Otra pequeña modificación de la pérgola es que se van a reducir el número de pantallas de vidrio, debido a las numerosas roturas sufridas. De este modo, en los cinco accesos al aparcamiento subterráneo y en los paños de cerramiento exterior de separación con el Parque se colocarán paneles de rejas metálicas (trámex) en lugar del vidrio actual; y en el resto de locales se mantendrá el vidrio en la fachada, pero incorporando “un peto de hormigón de 60 centímetros que reduzca el tamaño de los huecos y elimine la rotura por impacto en las zonas bajas”, al haber detectado el Ayuntamiento “que gran parte de los impactos en los paños rotos se producen en las zonas inferiores”.

En la cubierta del edificio, se va a reparar “una entrada de agua en los locales ocupados actualmente por las dependencias de la delegación de parques y jardines”, se van a tapar las luminarias del paseo “con una chapa plegada galvanizada atornillada al soporte” y volverán a sellarse las juntas.

Por último, se contempla la limpieza general del edificio, especialmente en suelos y fachadas, sustituyendo los paneles de policarbonato cuyo estado de conservación actual sea irrecuperable; y se pintarán los pilares exteriores “debido a la oxidación y las pintadas”.

Para todo ha fijado el Ayuntamiento un presupuesto de 990.641,86 euros y un período de ejecución de las obras de nueve meses.

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