Cádiz está más que acostumbrada a ver barcos. Barcos en el muelle, barcos en el Náutico, barcos en la Bahía en la zona del club Viento de Levante o bien fondeados frente al Club Alcázar en plena barriada de La Paz, pero de lo que no está demasiado acostumbrada es de ver este tipo de embarcaciones frente a nuestros más de 13 kilómetros de playa.

Por eso será que durante estos días ha llamado tanto la atención de los ciudadanos paseantes que han optado por pasar por el paseo de la playa de Santa María del Mar. Desde Fernández Ladreda se ha estado viendo durante estos días, de hecho ya este lunes no está y podría haberse desplazado más hacia la zona de La Caleta, un lujoso velero que ha podido resultar hasta misterioso para muchos.

Este periódico ha consultado con fuentes portuarias que han restado importancia a esta imagen confirmando, antes que nada, que el fondeo frente a la playa es del todo legal, aunque no suele ser habitual en capitales como Cádiz. Así no ocurre en otras provincias como las de Málaga o en islas como  las Baleares o Las Canarias.

Según las fuentes consultadas, se puede atracar el tiempo que se desee siempre que se respete la flora y la fauna del lugar y no se viertan desechos que puedan resultar perjudiciales para el medio ambiente. A este respecto, en lugares en los que el fondo marino está plagado de algas posidonias, cuyas praderas sumergidas están protegidas por la directiva Hábitat de la Unión Europea y declarada en Régimen de Protección Especial por la legislación española. Esto significa que su destrucción intencionada está prohibida.

De ahí que esté prohibido por completo fondear ahí, o más bien echar ahí un ancla que puede hacer daño a esta especie tan protegida.

Eso sí, no conviene olvidar que está prohibido fondear en los canales de acceso a los puertos, calas y playas (si están balizadas), y dentro de las zonas de baño debidamente balizadas. En todo momento debe respetar estas zonas, tanto por su seguridad como por la de los demás.

Así que este velero puede resultar peculiar y llamar la atención pero no pasa de ahí.