Allá por 2018, investigadores de las universidades de Cádiz, Huelva y el Algarve portugués trabajaban con la Agencia Pública de Puertos de Andalucía en el estudio de la viabilidad de conectar por vía marítima las provincias de Huelva y Cádiz, y la de éstas de éstas con el Algarve. La iniciativa estuvo coordinada por Antonio Querol, profesor de la Escuela de Ingeniería Naval y Oceánica, y por Francisco Piniella, investigador principal del proyecto y responsable del grupo de investigación de Política Marítima, que luego se convertiría en rector de la Universidad de Cádiz (UCA).
A ese impulso se le sumaría el intento por parte de Izquierda Unida, que hizo un llamamiento a todas las administraciones competentes en materia de transporte para reclamar el impulso definitivo a la conexión marítima entre las provincias de Cádiz y Huelva, así como a la puesta a punto, mejora y ampliación del sistema de transporte marítimo que actualmente funciona en la provincia de Cádiz.
Pero parece que ya todo ha quedado en proyectos y papeleos, ya que, en días pasados. la Junta de Andalucía señaló que los diferentes estudios que se han tenido en consideración sobre una posible conexión marítima de transporte regular de viajeros entre Huelva y Cádiz concluyen que “este servicio marítimo no atendería una demanda real”.
En una respuesta escrita a pregunta de la portavoz del Grupo Por Andalucía, Inmaculada Nieto, la Consejería señala que no atendería a una demanda real porque su puesta en marcha estaría fuertemente condicionada por el tiempo de trayecto (unas tres horas y 15 minutos frente a las dos horas y 15 minutos del coche privado) y el coste del mismo (en torno a 30 euros) frente a otros modos de transporte, como sería el uso del coche particular o el autobús.
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