Un interrogante de 20 meses

Las cosas de palacio van despacio, dice el refrán. Y esa lentitud que muchas veces se achaca a la administración pública la acaba de sufrir en sus carnes el grupo municipal socialista. Veinte meses se han cumplido desde que el PSOE municipal solicitó a Alcaldía -entonces en manos de la anterior alcaldesa, Teófila Martínez- información relacionada con el servicio de limpieza; información que posteriormente se ha reiterado en otras dos ocasiones al alcalde actual, José María González. Y no fue hasta ayer, veinte meses después de solicitarlo y tres días antes de que se celebre el pleno extraordinario que abordará el servicio de limpieza de la ciudad, cuando se recibió la información requerida (a medias) en el despacho del PSOE.

El 21 de abril del pasado año, en concreto, firmaba la petición el portavoz Fran González y la entonces concejal Aurelia Morales, solicitando a Teófila Martínez una documentación relacionada con la empresa concesionaria del servicio de limpieza (Sufi Cointer). Documentos TC1 y TC2 de agosto y diciembre de 2014 y de enero a abril de 2015; partes de la empresa y partes firmados conjuntamente por la inspección del Ayuntamiento y por la empresa correspondiente a las jornadas de trabajo y salida de servicios de los meses citados anteriormente; y contratos de trabajo formalizados para cubrir los servicios (según el pliego de condiciones de la adjudicación del servicio a la empresa citada) correspondientes al Trofeo Carranza de 2014, Carnaval de 2015 y Semana Santa de ese año 2015.

De todo ello, los socialistas recibieron ayer los documentos TC1 y TC2 -con las "limitaciones propias" de "que no se cedan a terceros, no se les de publicidad y se utilicen exclusivamente para la labor de control específica para la que se han cedido", advierte Alcaldía- y los partes de las jornadas de trabajo. No así con los contratos de trabajo también solicitados, esgrimiendo el Ayuntamiento que no dispone de esos documentos "que están protegidos por la Ley de Protección de Datos".

Por tanto, veinte meses después de un interrogante que se lanzó a la anterior alcaldesa sólo quedó ayer resuelto a medias. La transparencia en este caso, por tanto, se ha quedado sólo en translucidez.