Manos Unidas cumple 60 años y esta semana ha iniciado su campaña número 60 bajo el lema Creemos en la igualdad y en la dignidad de las personas. En esta edición, la organización refuerza su denuncia sobre la situación de la mujer en los países empobrecidos en los que trabaja e inicia un periodo de tres años en el que reivindicará el cumplimiento de los Derechos Humanos en todo el mundo.

La diócesis de Cádiz y Ceuta, a través de la Delegación de Manos Unidas, se suma a la celebración "de estos 60 años de lucha contra la pobreza y el hambre en el mundo" con una serie de actividades. El obispo diocesano, Rafael Zornoza Boy, presidirá este domingo a las 12.00 horas en la Catedral de Cádiz la misa de acción de gracias por esta efeméride. Asimismo, ha dirigido una carta a los fieles en la que destaca la labor de Manos Unidas a lo largo de estos años y la defensa de la dignidad de la mujer que la organización propone en su campaña anual.

En su carta, el obispo señala que la lucha de Manos Unidas "por la vida digna es una llamada a nuestro compromiso para colaborar con sus proyectos donde, defendiendo los derechos humanos, se promueven acciones que conducen al cambio de estructuras, valores y actitudes que favorecen la construcción de un mundo más justo y una sociedad más solidaria".

Destaca que la campaña de este año pone su foco en la mujer del siglo XXI, "para trabajar por la igualdad de los derechos y reconocer que las diferencias lógicas y complementarias entre el hombre y la mujer no han de ser elementos para la exclusión, sino para buscar la integración de todos, haciendo una sociedad más justa". En este sentido, afirma que en Manos Unidas conocen perfectamente el valor de la mujer, "pues ellas han sido las promotoras de esta corriente inmensa de ayuda a los necesitados para erradicar el hambre en el mundo", en referencia al origen de esta organización, que está en las mujeres de Acción Católica de España que lanzaron la primera campaña contra el hambre en 1959.

Zornoza habla también en su carta sobre la necesidad de apoyar la igualdad de oportunidades entre el hombre y la mujer, "y garantizar una igualdad objetiva ante la ley". "La mujer de hoy ha de ser motor de desarrollo y promotora de derechos, especialmente donde –inexplicablemente en nuestro siglo—, aún ni tienen voz ni son independientes. El genio femenino es necesario en todas las expresiones de la vida social. Las mujeres ocupan, además, un lugar destacado en el sustento de las familias y son imprescindibles en el desarrollo humano. Sin embargo, un tercio de las mujeres del siglo XXI no son independientes, ni seguras, ni con voz", señala el obispo.

La carta termina invitando a todos los gaditanos a colaborar con Manos Unidas en esta campaña "que despierta de nuevo nuestra sensibilidad y nos invita a actuar para que multitudes puedan cambiar su vida con nuestro apoyo decidido y acompañamiento, para hacer una sociedad más justa y equitativa. La caridad nos hace corresponsables en el bien común".