Los restos del buque del siglo XVII donde se jugaba al tres en raya vuelven a las aguas de Cádiz

El análisis de los restos del buque del siglo XVII descubierto en aguas de Cádiz concluye su fase de investigación arqueológica y documental. El pecio 'Delta I' ha sido devuelto al mar en una operación conjunta entre el Centro de Arqueología Subacuática (CAS) y la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC). Los hallazgos finales de esta investigación se conocerán más adelante. Durante los trabajos se realizaron descubrimientos curiosos como son las pruebas de algunos juegos a bordo de este buque, como son el tres en raya o el juego del cuchillo.

La operación de regreso al mar de los restos del pecio ha sido llevada a cabo en las inmediaciones de la Punta de San Felipe. La misma ha supuesto la introducción de los restos en un "depósito georreferenciado de carácter reversible con estructuras de acero galvanizado recubiertas de sedimento y geotextil", según la nota de prensa enviada por la Consejería de Cultura. En los últimos meses, aclaran que "el pecio ha sido objeto de un análisis integral que ha implicado su desmontaje completo con el fin de estudiar en detalle su sistema constructivo. Cada una de las piezas que lo conformaban ha sido analizada de forma pormenorizada siendo, tras su estudio, cuidadosamente colocadas una a una sobre palés, debidamente etiquetadas para asegurar su correcta identificación y disposición dentro del conjunto".

Los trabajos de investigación del CAS han tenido lugar estos meses en el muelle 5 de Navantia. El navío ha sido calificado como de "alta precisión" por el equipo técnico . Tal como se expone en el comunicado, "las 401 piezas de madera que conforman el casco, algunas con un peso superior a 1.800 kilogramos, fueron analizadas de manera individual mediante un exhaustivo registro visual, fotogrametría, escaneado 3D y fotografía de alta resolución".

El barco naufragado en Cádiz en el siglo XVII es una "construcción atlántica mixta"

Una de las conclusiones a las que se ha llegado desde el CAS en este tiempo de trabajo es que el pecio llamado Delta I es una "construcción atlántica mixta". Estas se caracterizan por “un proceso secuencial en el que se colocaba primero la quilla, seguida de las cuadernas maestras, las varengas, el forro externo, los genoles flotantes y, por último, el forro interior”. El resultado final de esta investigación se conocerá más adelante.

Por su parte, la consejera de Cultura y Deporte, Patricia del Pozo, ha destacado que “Andalucía se ha situado a la vanguardia en materia de conservación y estudio del patrimonio arqueológico subacuático con un proyecto que ha permitido estudiar por primera vez en España fuera del agua un barco datado en el siglo XVII”. Teófila Martínez, como presidenta de la APBC, también ha ensalzado el trabajo de sus técnicos y de su institución como colaboradora en esta operación.

Un enorme ciclón en 1671 está detrás de una de las hipótesis que se manejan sobre por qué acabó en las profundidades de Cádiz este pecio que se ha estudiado en el último año.

Así era la vida a bordo de un buque del siglo XVII

Durante la excavación y limpieza del 'Delta I' se han podido obtener datos que dan una idea de la vida en la época. Por ejemplo, se encontraron huesos de frutas, restos de tinte azul, fragmentos cerámicos y metálicos. Todo ello, ayuda para hacer un dibujo de cómo era ir a bordo de un barco en aquel siglo. También se han descubierto marcas de juegos en la madera como el tres en raya e incisiones triangulares que podrían vincularse al juego del cuchillo.

Asimismo, la limpieza del pecio ha posibilitado recuperar nueve fragmentos de cañones reutilizados como lastre y más de 80 balas de hierro. De especial interés también ha sido la posibilidad de recoger muestras de especies marinas y muestras de madera, estopa y brea. Según la Junta de Andalucía, "el conocimiento generado va a sentar las bases para futuras investigaciones sobre la construcción naval y la historia marítima global".