Un vía crucis por las calles con la imagen de Jesús de la Humillación que se venera en Santiago; un triduo al Nazareno de la Obediencia en la Merced; un besamano a la Virgen de los Dolores de San Juan de Dios... La Cuaresma cada vez suma más cultos y actos a imágenes -algunas de ellas de alto valor artístico o de amplia devoción- que no procesionan en Semana Santa o que ni siquiera son titulares de la cofradía que le organiza estos cultos. ¿Por qué se celebran estos actos? ¿Pueden ser el inicio de la incorporación de nuevos pasos o hermandades a la Semana Santa? Las hermandades o instituciones que realizan los cultos cuaresmales a estas imágenes se pronuncian al respecto.

El Cristo de la Humillación fue una donación que una familia hizo a la cofradía de la Piedad en los años 40. Desde esa fecha hasta 1969, este Cautivo procesionó en Semana Santa. Y ahora la corporación del Martes Santo, propietaria de la imagen (que goza de mucha devoción en Santiago), sigue dedicándole un triduo (que se celebró esta semana) y sacó la imagen a la calle en vía crucis el viernes. El hermano mayor, Miguel Ángel Molina, no sabe por qué nunca se incluyó a Jesús de la Humillación como titular, y reconoce que ahora "es complicado" hacerlo. Y aún es más complicado que la imagen vuelva a procesionar en Semana Santa, debido entre otras cosas a la necesidad de hacer un paso nuevo o al escaso número de hermanos que procesionan hoy en día en Piedad.

La esclavitud de la Merced rinde culto al Nazareno del Obediencia, una imagen que está en la Merced desde que la parroquia volvió a reabrir sus puertas y que la corporación pidió cuando se reorganizó. Desde entonces le ha rendido cultos y este año (el 24 de marzo) recuperará un vía crucis que se perdió hace años por el escaso público que lo presenciaba. El hermano mayor de la Merced, Antonio Aranda, asegura que la imagen tiene mucha devoción y que los viernes "va mucha gente a verlo", pero se muestra tajante al afirmar que la intención "no es ni mucho menos salir en Semana Santa" (al hilo de algunas insinuaciones que han surgido al respecto este año). "Demasiado con que a día de hoy podemos sacar a la Virgen de la Merced", insiste Aranda, que también comenta que es intención de la cofradía incluir al Nazareno de la Obediencia como titular.

En Santa Catalina existe otro Nazareno que desde el año pasado sale en vía crucis por las calles del barrio de La Viña. El párroco, Rafael Fernández, explica que es Cáritas parroquial la encargada de este culto, con el que se pretende "dar devoción a esta imagen y procurar una acción pastoral más en la parroquia". Este Nazareno, que saldrá el sábado próximo, tiene también devoción entre los vecinos, y tiene la particularidad de llevar la Cruz al revés.

Otra de las imágenes a las que este año se dedicarán cultos en Cuaresma es la Virgen de los Dolores, una talla italiana del siglo XVIII que está en la iglesia de San Juan de Dios. La hermandad de la Santa Caridad ha organizado un besamano para los días 23, 24 y 25 de marzo en la capilla de la ciudad a raíz de la petición de hermanos y devotos de esta imagen. Sobre esto, la hermandad comenta que no descarta permitir que un grupo de hermanos y devotos pueda sacar a la Virgen en Cuaresma. "Pero no se hará una cofradía de penitencia", aseguran de manera tajante.

También se celebran cultos y actividades en estas semanas al Cristo de la Mirandilla, que estará en besapié el 13 y 14 de marzo y al que incluso se le dedicará un pregón el día 16. Esta imagen ha salido en vía crucis en alguna ocasión, y ayer se estrenó una marcha en su honor en un concierto a cargo de la Agrupación Musical Sagrada Cena.

Por ahora, estos cultos se quedarán en eso: en actos que completan la agenda cuaresmal pero que no supondrán -al menos a corto plazo- ninguna ampliación de la nómina de la Semana Santa. Son los otros cultos de la Cuaresma.