El antes y el después de una habitación de Airbnb en Cádiz

La forma de elegir un alojamiento vacacional ha cambiado. Ya no solo pensamos en hoteles, hostales o pensiones a la hora de buscar un sitio de descanso para nuestros viajes. Desde hace varios años los apartamentos, tanto de empresas dedicadas en exclusiva a ellos como de particulares, se han convertido en una de las opciones más demandadas.

Una de las plataformas que ha revolucionado el mercado con esta fórmula es Airbnb, la compañía que nació en el año 2007 en San Francisco cuando dos de sus fundadores recibieron a tres huéspedes en su piso y vieron las posibilidades que ofrecía este modo de alojamiento. Desde entonces, millones de personas han decidido alquilar su propia vivienda o alguna de sus habitaciones para estancias cortas.

Uno de ellos es Mariano Parodi, un gaditano que en febrero de 2022 pensó que sería buena idea subir a Airbnb una habitación de su casa para que los turistas que quisieran conocer Cádiz pudieran hospedarse en ella. "La experiencia ha sido muy buena. Desde el principio he tenido excelentes valoraciones y es algo que me sorprende porque cuando empiezas no sabes muy bien qué pueden opinar los viajeros".

Estas buenas críticas lo convirtieron en superanfitrión, la categoría más alta a la que aspiran los propietarios de viviendas o habitaciones y que otorgan los usuarios en función de los servicios, calidad y hospitalidad prestada por el dueño del alojamiento. Precisamente este 'título' de superanfitrión le ha valido a Mariano, Nanín para los amigos, para ser uno de los tres elegidos por Airbnb en España para realizar una renovación en la habitación que alquila en esta plataforma.

Los tres superanfitriones son de Valencia, Santander y Cádiz, y esta acción de rediseño forma parte de la campaña que la empresa está desarrollando para relanzar esta categoría. "Las habitaciones en Airbnb son el corazón y el alma de una industria turística más sostenible. Contribuyen a que muchas familias puedan generar ingresos adicionales y a afrontar el constante aumento del coste de vida. Con frecuencia, estas opciones de alojamiento ofrecen una alternativa más asequible a las tradicionales, permitiendo que un mayor número de personas accedan directamente a los beneficios del turismo y proporcionando la manera más auténtica de conocer una ciudad", explica Mónica Casañas, directora general en Airbnb Marketing Services SL.

Para este proyecto de renovación Airbnb ha contado con el diseñador Tas Careaga, que ha trabajado mano a mano con Nanín para reflejar su personalidad a la vez que crear un espacio acogedor. "La renovación consistía en hacer algo en muy poco tiempo y con un presupuesto ajustado, pero teniendo en cuenta sus gustos y necesidades. También teníamos que utilizar materiales sostenibles como maderas certificadas españolas", señala Tas.

Desde Airbnb tenían claro que lo fundamental era que tuviera mucho protagonismo lo local y que se notara la mano de este diseñador en la reforma. "Yo quería que tuviera referencias de Cádiz, así que como me gusta mucho la fotografía hice fotos de varios puntos de Cádiz, con el mar de protagonista, y puse mi firma, que son las tres N que lleva mi nombre sin vocales", subraya el superanfitrión gaditano.

Tas afirma que para él era importante "que todo estuviera hecho a medida. El cabecero, por ejemplo, está hecho a mano con los huecos para los enchufes incluido. El proceso de ejecución duró tres días, pero el de diseño se desarrolló en varias semanas. Los materiales utilizados son del norte, de bosques españoles, es pino del Cantábrico".

Se han mantenido los muebles como el escritorio, que para Nanín era importante por si se alojaban trabajadores o estudiantes, un gran espejo y la cama doble, y se han añadido unas originales mesitas, el cabecero, un ventilador de techo, una gran alfombra de rafia y se ha sustituido el armario por un perchero, que aporta ligereza al espacio. Se ha apostado por los colores cálidos, las plantas yla luz, que es la gran protagonista de la habitación.

En cuanto a la decoración, varias cámaras antiguas como guiño a la afición del propietario y unos bonitas imágenes de la ciudad. "Las fotos las hizo Nanín, pero yo le pedí que se centrara en Cádiz y en el mar porque la gente que viene a esta ciudad busca sobre todo eso. Yo soy fotógrafo y en cada proyecto me gusta dejar mi marca. Quise que fueran en blanco y negro, reencuadrarlas, hacerles un retoque un poco más a mi estilo, más oscuro, imprimirlas en papel de algodón en Alemania y enmarcarlas en madera. Son detalles que se cuidan y se notan", mantiene Tas Careaga.

Para el diseñador la de Cádiz "es la habitación más grande de las tres que hemos renovado, también la más luminosa y la que más va a llamar la atención".