Un hombre ha agredido verbalmente y amenazado a un celador conductor del Centro de Salud Olivillo, que ha interpuesto una denuncia en la Comisaría de la Policía Nacional.

Los hechos ocurrieron el pasado viernes a las 8:15 horas de la mañana, cuando un usuario acudió a pedir cita con su médico al Olivillo. Cuando el celador conductor que lo atendió en Admisión le pidió la documentación necesaria para poder darle la cita (la tarjeta sanitaria o el DNI), "contestó con actitud chulesca que no la tenía porque se la habían robado", según ha relatado el profesional agredido a este periódico, añadiendo que el hombre le tiró "un tocho de papeles sucios sobre la mesa para que mirara si había ahí algún documento que lo identificara, que ese era mi trabajo". Asimismo, le mostró un escrito del centro penitenciario Puerto 2 que certificaba su reciente salida de prisión.

El celador conductor le dijo que tenía que ser él quien revisara su propia documentación, "y en ese momento, se levantó, dio un puñetazo en la mesa y empezó a dar patadas a macetas del centro y a la puerta de salida, y a soltar improperios".

Según recoge la denuncia, el usuario le gritó: "Tú eres una maricona. Me voy a cagar en tu puta madre. Eres un violador, hijo de puta".

El denunciante se levantó para impedir que siguiera golpeando el mobiliario, y el usuario le amenazó diciéndole que saliera, "que te voy a dar lo tuyo aquí fuera".

Este profesional, que es delegado en Cádiz del Sindicato Andaluz de Celadores Conductores (SACECO), avisó a la Policía Nacional, "que llegó en tres minutos, pero el hombre ya se había marchado". Gracias a las indicaciones de algunos testigos, lo encontraron en un bar cercano y se lo llevaron a la Comisaría para identificarlo. Este martes se celebrará un juicio rápido por este asunto.

El agredido quiere destacar el apoyo que ha recibido tanto de los profesionales de su centro de salud como del Distrito Sanitario Bahía de Cádiz-La Janda. Y recuerda que desde SACECO han reclamado más seguridad en todos los centros de salud, para que al menos haya un vigilante "porque los profesionales estamos muy desprotegidos".