"Van a quitar a la gente la costumbre de pasar por aquí"
Los comerciantes de Corneta Soto Guerrero, indignados con las obras del parking
Liberados de la obra que padecieron en 2009, los comerciantes de la calle Corneta Soto Guerrero no logran despertarse de la pesadilla que les ha supuesto la obra de ampliación del parking de Canalejas, lo que ha provocado que el tránsito por esta vía haya descendido hasta afectar a las ventas de los establecimientos. Coinciden además en señalar al traslado de la estación de autobuses desde Comes a Renfe como otra de las causas de que por la calle pase menos gente. "Llevamos dos años padeciendo la obra de un parking sólo para ampliarlo en pocas plaza: esto es una tomadura de pelo. Puedo decir que las ventas han bajado un 50 por ciento gracias a la inestimable labor del Ayuntamiento", comentaba ayer un comerciante que no quiso dar a conocer su nombre. Añadió que el daño causado "es irreparable porque va a quitar a la gente la costumbre de pasar por esta calle". Por su parte, Adela Moreno, de la tienda de lencería Marade, explicaba que "incluso este año hay menos ventas que el año pasado, que tuvimos la calle levantada. Intentando sobrevivir con la idea de que vengan tiempos mejores". Recordaba que la calle "era de paso para la gente que iba a Comes a coger el autobús o coger en Diputación el de San Fernando" y añade que los comerciantes llevan "dos años sin levantar cabeza y no tengo fe hasta septiembre cuando empiecen los colegios y pueda vender camisetas, calcetines y todo el vestuario propio de los niños. El año pasado estábamos rebotados y este, resignados".
La tienda de moda juvenil Yellow Rat Bastard ha estado a punto de cerrar debido al descenso en las ventas. Es más, tuvo un tiempo el cartel de 'Se traspasa' en el escaparate. "Entre las obras y los autobuses desplazados, el paso ahora es por General Luque en lugar de esta calle. Menos mal que con los cruceros nos defendemos. El martes hubo dos y se llenó la tienda", decía Soraya Díaz, dependienta de este comercio.
Una tienda de golosinas no duró ni un año en esta calle. La obra del parking espanta al público.
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