Trabajadores del Programa de Zonas de Necesidades de Transformación Social agradecen que el alcalde les haya atendido y tras la reunión, haya asegurado que el Ayuntamiento asumirá el coste de la continuidad de dicho programa. Sobre todo, se congratulan por las declaraciones realizadas por el primer edil en las que garantizaba que "los trabajadores que estaban adscritos al programa no peligran".

Aun así, advierten de que "nadie nos ha comunicado esto oficialmente y nos quedan muchas dudas por despejar, como saber a qué programa iremos adscritos y en qué condiciones, la fecha de reinicio del programa o en qué zona de la ciudad podremos seguir trabajando, así como qué familias podrán ser atendidas", señalan en una nota de prensa, en la que manifiestan la necesidad de que "de las palabras se pasen a los hechos".

"Todos los que formamos el equipo del Programa de Zonas esperamos cuanto antes la llamada que nos anuncie la más inmediata de las reincorporaciones, dando por hecho como no puede ser de otra manera, que el Alcalde de Cádiz va a cumplir con su palabra. De igual manera, más de 100 familias aguardan otra llamada, que es la que dé respuesta a sus necesidades en este mismo sentido por parte del propio Ayuntamiento", indican.

El equipo del Programa de Zonas denuncia que nunca fue consultado e informado sobre la nueva estrategia regional venidera, la denominada ERACIS. Explica que "una vez visto pasar por nuestra propia puerta el tren de la ERACIS, al que solo se subían 2 de los 9 trabajadores afectados, el equipo del Programa de Zonas, huérfano técnicamente hablando, se aventura por cuenta propia en la búsqueda asesoramiento y de soluciones". Cuenta que los trabajadores pusieron sobre la mesa de las concejalas Ana Fernández y Eva Tubío un informe técnico proponiendo pasar el equipo completo y en bloque al Plan Concertado. "Las respuestas que hemos recibido a esta propuesta han sido negativas, a la vez que poco contundentes. Nos quedamos, una vez más, con la sensación de que no se puso toda la carne en el asador para llevar nuestra propuesta a buen término, ni haber hecho participar a todos los actores con poder decisorio en la cuestión", lamentan.

Asimismo, critican la propuesta que planteó el Ayuntamiento de dividir al equipo de trabajadores, de manera que habrá hasta tres formas diferentes de "dar salida" al problema. Consideran que esto "es una fuente futura de generación de conflictos" porque pueden generar agravios comparativos.

Otro problema importante que destacan de esta fórmula es que "deja al descubierto la atención a los menores del centro histórico, puesto que las monitoras, estado adscritas a la ERACIS, no tendrán libertad para atender casos de otras zonas de la ciudad". Afirman desconocer qué plan se habrá previsto desde el equipo de Gobierno, para atender a estas familias.