El Toro pasea sus sabores por Cádiz

José Ruiz Navas abrió el bar restaurante El Toro de Cayetano en 2018. Tres años después, casi cuatro, este hostelero gaditano ha sacado a pasear su marca, la del Toro ya asentada en su primer local de la Avenida, y la ha llevado hasta el casco histórico de Cádiz, en la calle Sacramento, donde en plena pandemia ha apostado por hacerse con el local en el que estaba El Fogón de Mariana, esquina a la calle Rosario Cepeda, donde abrió sus puertas hace unas semanas. Y si en la avenida Cayetano del Toro ya jugó con la ubicación para nombrar el establecimiento, intercambiando las palabras, en el casco histórico ha mantenido esa línea con el nuevo restaurante, El Toro de Sacramento.

En el mundo de la hostelería desde los 17 años, trabajando con Cueto o Beardo, entre otros, José Ruiz dio el paso de trabajar por su cuenta, y riesgo, cuando hace unos seis o siete años abrió en el mercado gastronómico de la Plaza La Brasería de Cádiz.

Aquella experiencia en solitario lo animó en 2018 a hacerse en la Avenida con un local de amplia tradición hostelera en la que dio forma a su proyecto gastronómico sin saber que, con el tiempo, lograría crear con El Toro una “marca reconocible” que le ha permitido llevar sus sabores de Puertatierra al centro histórico.

Entre ambos locales, eso sí, hay alguna diferencia que, en general, no modifica su oferta gastronómica, aunque sí la matiza. Manteniendo su especialidad en las carnes a la brasa, hechas con piedra volcánica, en el nuevo local incorpora también una carta en la que aparecen guisos de Cádiz: berza, menudo, puchero.... Y todo con la posibilidad de elegir entre plato y platillo, una denominación a medio camino entre la ración, la media y la tapa. Respecto a la carne, José Ruiz apuesta por el retinto y el cerdo ibérico de la zona, además de decantarse por una ternera de Ávila que el propietario escoge personalmente cada mes en un viaje a la provincia castellana.

Esta marca no olvida otros productos como el paté de cabracho o la crema de mariscos, y aprovecha la cercanía del mercado de abastos para ofrecer en su carta, sobre todo de cara al visitante, platos como el atún a la brasa o los chipirones a la plancha.

Pero si el hilo gastronómico de ambos locales mantiene cierta similitud aun con las citadas diferencias, cada uno de ellos tiene una manera propia de presentarse en la hostelería: mientras que en la avenida El Toro de Cayetano cuenta con terraza y un horario que le asemeja a un bar porque también sirve desayunos, en El Toro de Sacramento la terraza es, evidentemente, una quimera, y el establecimiento funciona como un restaurante, pues se sirven comidas y cenas.