Luto en la hostelería de Cádiz. El sector sigue recibiendo varapalos con la pérdida de algunos de sus representantes más conocidos en la ciudad. En una semana negra en la que se ha lamentado tanto la repentina muerte de Pablo Grosso, llega otro mazazo con la muerte de José Parrado Grimaldi, Pepe Parrado, que fallecía esta madrugada a los 72 años de edad.

Curiosamente, la muerte de Parrado ha sobrevenido cuando se encontraba de viaje en las Islas Canarias, donde ha sufrido un infarto letal. Hechos similares, por tanto, a los que le costaron la vida a Grosso hace tan solo unos días mientras estaba de viaje en Tailandia.

Parrado era natural de Medina, pero desde muy niño vino a Cádiz para empezar a trabajar en la hostelería. La cafetería La Bella Sirena, en la calle Lázaro Dou (donde hoy está El Fogón de Mariana), sería su primer trabajo, cuando apenas tenía 10 años. También trabajaría en el bar Costa Sol, frente a la playa de Santa María del Mar (donde hoy se sitúa El Candilazo), hasta que en 1974 abriría su primer negocio, el Bar Trille, donde estaría once años y donde conocería a su esposa, Antonia Blanco, que fallecería en 2005.

En 1979 pondría en marcha el que puede considerarse el primero de sus bares de éxito, el Nebraska, que en 1982 acabaría cediendo la gestión a su hermano Juan Antonio.

Sería en el año 1986 cuando abriría el bar Mari y Jose, en la Avenida de María Auxiliadora, frente al colegio de Salesianos. Y ya en 1988 pondría en marcha otro bar, La Noria, junto a su hermano Salvador.

A todos estos negocios hay que unir La Glorieta, abierta en el año 2005, y el bar del colegio Salesianos.

Entre todos los platos de la cocina de Parrado, quizás destaquen los caracoles que cocinaba cada temporada y que eran muy reconocidos en la ciudad. Una receta que empezó a cocinar hace medio siglo y que cada año le obligaban a servir más de 500 kilos, solo en el bar Mari y Jose.

En el año 1992 ya sufriría Parrado un infarto que lo alejó de los fogones, aunque se mantuvo al frente de sus negocios. Esta madrugada y en Las Palmas, le ha sobrevenido este fallo cardíaco que, esta vez sí, le ha costado la vida. Descanse en paz.