Manuel Abollado de la Pascua, presidente del Club del Automóvil Clásico de Cádiz, murió ayer a los 65 años. Fascinado por los vehículos clásicos, Abollado de la Pascua, enfermero de profesión, se ha llevado vinculado a este mundo durante más de cuarenta años, y su nombre ha estado detrás de los numerosos actos organizados en la capital en torno a los coches antiguos. Se dedicó a ello con pasión, desde su puesto de responsable del Club del Automóvil Clásico, y no era extraño verlo circular por la ciudad conduciendo algún modelo clásico, como el histórico Seat 600.

Y también dejó huella como enfermero supervisor en las plantas de Neurología y Neurocirugía del hospital Puerta del Mar, donde demostró su entrega y profesionalidad, y donde destacó por la humanidad con la que trataba a los pacientes.

Los oficios religiosos por Manuel Abollado de la Pascua serán hoy a las 9.30 horas en el tanatorio de Servisa.

Abollado de la Pascua fue hijo de Manuel Abollado Moreno, fallecido en 2015 y uno de los últimos compositores de marchas procesionales del siglo XX en Cádiz, y que recibió por ello un homenaje en abril del año 2011.