La baja paternal de Kichi durante al menos los próximos tres meses es para el presidente del grupo municipal del PP, Juancho Ortiz, "lo mejor que le podía pasar a Cádiz". El popular ha tirado de ironía para criticar que si el alcalde "lleva seis meses sin salir de casa, al menos que conste oficialmente" y ha asegurado que la ausencia en lo que queda de 2020 "la ciudad no lo va a notar en nada".

"Llevo clamando desde hace ya cerca de un año para que este hombre, que es que no tiene ganas de trabajar, que no las ha tenido desde que llegó en 2015, se eche a un lado y deje al frente al alguien que sí quiera", ha afirmado Ortiz, en referencia a las distintas ocasiones en las que ha solicitado a la oposición que se lleve a cabo en el Ayuntamiento una moción de censura contra el alcalde.

Juancho Ortiz asegura respetar la decisión de González de acogerse a la baja paternal. "El problema es que Kichi estima que lo oportuno es quitarse del medio cuatro meses, cogerse una baja de paternidad de 120 días mientras que los comerciantes de Cádiz cierran sus negocios, mientras que los autónomos de Cádiz no pueden cogerse libre ni el día que van al médico, mientras el número de personas que duermen en la calle se duplica, mientras los policías locales de Cádiz están reclamando que alguien les escuche, y mientras la ciudad, en definitiva, va a la deriva" ha criticado. Y es que el líder del PP lamenta que González "actúe como si fuera un funcionario que ha cogido la plaza, y no es así; él se presentó voluntario a esto porque iba a traer a todos los gaditanos que estaban fuera trabajando y porque le iba a dar casa a todo el mundo".

También ha tenido el concejal de la oposición palabras para el PSOE, "su socio de facto, quien lo sostiene ahí a pesar de que la mayoría de los gaditanos no lo ha votado y que piensa -aún hoy- que es antinatura echar a Kichi, cuando es él mismo el que está yéndose". "Al menos que dejen a otro que no sea tan flojo, porque llevamos un año sin conocerle una sola iniciativa para la ciudad, ni una sola medida aparte de su manido juego de cambiar nombres en el callejero", ha concluido Ortiz.