Viernes Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Viernes Santo en la Semana Santa de Cádiz 2024

De andar por casa

Historia y distinción en una casa en El Puerto

  • Todas las estancias de esta vivienda rehabilitada muestran la pasión y el conocimiento de los propietarios por el pasado y la decoración

Salón comedor de la casa con una sillería de nogal histórica.

Salón comedor de la casa con una sillería de nogal histórica. / Ignacio Casas de Ciria

La vivienda que hoy recorremos se ubica en una casa histórica en El Puerto de Santa María.

La propiedad en su origen de la familia Oneto fue mandada a construir en 1670 por Luis Guzmán y Soto Contador Mayor del VIII duque de Medinaceli. En su arquitectura cuenta con uno de los patios porticados y una escalera monumental barroca de mármol genovés más impresionantes de la ciudad. 

En la vivienda, situada en la planta baja de dicha casa, se ha realizado una reforma respetuosa utilizando materiales antiguos. Cuenta con  una superficie de 120 metros cuadrados repartidos en cuatro dormitorios y un patio con jardín vertical privado.

Entramos por un zaguán adyacente al impresionante y perfectamente conservado patio con columnas donde se encuentra la escalera.  La puerta de la entrada que da la bienvenida es de caoba claveteada y doble hoja dando acceso a un amplio pasillo que distribuye la casa; las dos puertas de la izquierda abren a los dormitorios, uno de ellos con baño en suite; las de la derecha, a la cocina y otro cuarto de baño; la frontal a la zona de salón-comedor desde donde se accede al tercer y cuarto dormitorio  y al amplio patio privado con muebles de hierro y jardín vertical con buganvilla, jazmín e hibisco. 

El espacio descrito era antes una gestoría con tres despachos en la que se había desvirtualizado la disposición original del inmueble.  Aparte, se había disminuido la altura de techo considerablemente mediante la colocación de falsos techos de escayolas, y tenía unos suelos de tarima flotante y cuarto de baños y cocina de aspecto muy mejorable. 

La reforma duró catorce meses y ha consistido en la recuperación de la fisonomía original y altura de techo, unos sorprendentes 4,20 metros de altura con viga vista. Para ello se han utilizado elementos decorativos antiguos, tal es el caso de puertas de cuarterones delsiglo XVIII -algunas originales de la casa que hubo que decapar y otras de las misma época que recibieron como regado de un familiar-, óculos de madera y cristal tan característicos  de las bodegas de la zona,  la instalación del suelo de mármol en damero que cubre toda la vivienda con las medidas exactas  de la galería de la casa de Mora en Cádiz y la recuperación del hidráulico del pasillo.

La decoración hace un guiño a la zona geográfica y época del edificio, con una sillería de nogal estilo Reina Ana español  C. 1750, grabados de principios del XIX con escenas de las guerras napoleónicas en Cádiz y El Puerto de Santa María, otra colección de litografías iluminadas con tipos populares gaditanos y toreros de la época goyesca, mesas, sillas, cómodas y elementos de carpinterías de la época Carlos IV. Todas las contraventanas de la casa han sido recuperadas con una gran restauración. También faroles antiguos que han sido recuperados fueron instalados en pasillos y dormitorios. Uno de los baños tiene una bonita lámpara de aceite imperio de bronce parcialmente dorada que ha sido electrificada.  Todo ello sin olvidar la comodidad que ofrecen los amplios sofás modernos .

El suelo de damero de mármol que cubre toda la casa ha sido envejecido, el suelo hidráulico de un pasillo es original de la época Alfonsina y los sanitarios de los baños son del modelo Carmen de Roca de inspiración art-decó y algunos de ellos han utilizado lámparas originales para su iluminación. La cocina , sencilla y funcional, cuenta con un fregadero cerámico.  

Todas las estancias de la casa se encuentran comunicadas al exterior recibiendo la luz solar a través de grandes ventanales. 

En todos los espacios y rincones de la vivienda se refleja la pasión y el conocimiento de sus propietarios por la historia y los elementos decorativos. 

La recuperación de esta casa es un ejemplo de la importancia de la rehabilitación para la dinamización económica del centro de El Puerto de Santa María.