La crisis está haciendo emerger toda clase de negocios o prácticas con las que obtener algunos ingresos económicos. Y no siempre se hace conforme a la ley. La Unión de Comerciantes de Cádiz ha informado de una práctica ilegal que en los últimos tiempos se está llevando a cabo en la ciudad y que consiste en la venta ambulante de pan a domicilio, en unas condiciones que aseguran no cumplen con la legislación vigente en materia higiénico-sanitaria.

Según la asociación de comerciantes, este tipo de actividad ambulante se está realizando en furgonetas que no están debidamente acondicionadas para el transporte de pan, e incluso en ciclomotores.

Lógicamente, esta venta paralela está afectando a los comercios especializados en pan, ya que merma su nivel de ventas. Y ante esta situación, la entidad anuncia que facilitará a las autoridades competentes "los datos de los vehículos que están realizando este tipo de reparto ilegal, así como las zonas en las que reparten".