Decorar con Meninas
De andar por casa
La reforma integral de los espacios de esta casa con vistas al mar y al Castillo de Santa Catalina ha sido dirigida por el estudio de arquitectura ‘Endosdedos’
La vivienda que hoy se muestra ha sido reformada por el estudio de arquitectura ‘Endosdedos’, que se ha encargado de la distribución de todos los espacios de la casa. Con ello han desarrollado una arquitectura actual, respetando la historia de la vivienda.
Sus propietarios, Jesús González Santos y María Luisa Mesa, han reflejado en la decoración de la casa su pasión por 'Las Meninas' y por todo lo que se refiere a la cultura gaditana, tanto en la pintura como en la artesanía y en la escritura.
La casa tiene una superficie de 150 metros cuadrados que se distribuyen entre una zona de recibo con salón, comedor y biblioteca, la cual comunica con tres dormitorios, dos baños y la cocina, con el office. En todas las estancias se puede disfrutar de vistas al mar y al Castillo de Santa Catalina desde sus ventanas.
El comedor lo preside una mesa de madera y cristal de estilo rondeño acompañada por dos sillones y cuatro sillas del mismo diseño. Sobre el centro de la mesa se apoya un jarrón vintage con una gran diversidad de colores, de procedencia familiar. Uno de los elementos a destacar de la casa es el techo de esta estancia, que refleja un baldaquino inspirado en la cúpula de la Catedral de Cádiz, con su mismo color amarillo.
En uno de sus laterales se ubica una vitrina que custodia una colección de juguetes de hojalata antiguos. Entre sus pinturas se encuentra una del ilustrador gaditano residente en Madrid Joaquín González Dorao, que representa una vista de Cádiz, personalizada para los propietarios de la casa. En otra de sus paredes cuelga un póster de la ilustradora gaditana Gloria Garrastazul, realizado para una exposición.
En esa misma zona de recibo se encuentra el comedor, en el cual se utiliza una lámpara diseñada con pájaros de papel para iluminar el espacio. Un sofá chaise longue de gran tamaño tapizado en gris sirve de cómodo asiento en el salón.
Entre las colecciones que ornamentan esta estancia se encuentra un conjunto de arquitectura de diferentes faros, algunas pinturas de las torres vigía de Cádiz y paisajes que reflejan escenas gaditanas, adquiridas en su mayoría en el Mercado de Arte de Navidad. Una de sus esquinas, la decora una ‘Menina piconera’ realizada por el decorador gaditano Onofre.
La biblioteca es uno de los espacios más originales de la casa por su ubicación. Esta estancia es conocida como 'la pecera' por la forma en que la delimita y separa de los demás espacios de la casa, con una carpintería de diseño industrial y cristales. Todo el mobiliario de la carpintería ha sido realizado por la carpintería Hermosilla, de Sanlúcar de Barrameda. Para todos los muebles se ha elegido el color wengué, muy utilizado en decoración de interiores, que surge de combinar los tonos grises y marrones, con algo del color cobrizo.
En la biblioteca se almacena un gran número de libros de diferente temática, predominando los temas de historia local, novela negra y cómics, una de las grandes pasiones de su propietario, Jesús González Santos. Entre los elementos decorativos que ornamentan la biblioteca se encuentra una gran diversidad de cerámica, destacando un jarrón azul y blanco del ceramista ubetense Tito. Para la iluminación de la estancia se han utilizado unas lámparas vintage.
Otra de las zonas de la vivienda que ha se ha sometido a una reforma integral es la cocina. Para ello se han revestido las paredes de azulejos personalizados en tonos azules inspirados en la Mezquita Azul de Estambul. El hueco que comunicaba con una antigua puerta de servicio de la casa ha sido cegado y utilizado como despensa. La puerta de esta despensa ha sido pintada por su propietaria, María Luisa Mesa, con una ‘Menina caletera’.
El office, para el que también se ha elegido el color amarillo en sus paredes, se encuentra integrado en la cocina, iluminado con una lámpara vintage adquirida en el mercadillo de los domingos de la Plaza.
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