Fuentes policiales señalaban ayer que los dos detenidos en la mañana del pasado domingo después de atracar con cuatro machetes una tienda de frutos secos en la calle San Francisco están relacionados con otros robos similares a establecimientos comerciales de la capital gaditana. En la jornada de ayer los investigadores policiales efectuaban registros domiciliarios a los detenidos y seguían atando cabos que pudieran llevarles a esclarecer otros atracos, que bien pudieran ser los de la administración de loterías de Los Porches la semana pasada y otros en tiendas de frutos secos del barrio de La Laguna.

De hecho, y según el testimonio de la dependienta del turno de tarde de la tienda de frutos secos, compañera de la mujer que sufrió el asalto en la mañana del domingo, agentes policiales le aseguraron tener sospechas de que los detenidos habían protagonizado otros robos en los últimos días. Uno de ellos se produjo en la administración de loterías de la plaza de Los Porches llamada Regalos Ricardo. Allí, dos individuos camuflados con casco y pasamontañas y armados con un cuchillo y con un hacha atracaron el establecimiento a las siete y media de la mañana del martes 28 de noviembre. A esa hora, la esposa del propietario ya se encontraba en el interior de la tienda cuando entraron dos personas que golpearon a la mujer en varias partes del cuerpo para llevarse el botín. En ese momento, entró el esposo de la víctima y vio a su mujer tendida en el suelo, haciendo frente a los atracadores agarrando a uno de ellos por el pecho. Tras coger el dinero, más de mil euros, salieron de la tienda y huyeron en un ciclomotor de pequeña cilindrada.

Con la precipitación los ladrones se dejaron olvidada el hacha, que fue posteriormente recogida por la Policía Nacional para analizar si tiene huellas de uno o de los dos atracadores.

En el atraco del domingo en la calle San Francisco los asaltantes se hicieron con más de 700 euros, pertenencias de la empleada como el boso y un teléfono móvil, y cuchillos y tijeras de la tienda. Tras salir corriendo del local, la dependienta alertó con gritos de lo ocurrido y el interés de un ciudadano hizo que los fugitivos se pusieran nerviosos y no pudieran arrancar una moto, que se les cayó al suelo. Testigos indicaron que tras la fallida huida en moto los atracadores corrieron hacia la plaza de España y se montaron en un autobús de la línea 5. Allí, al comprobar que la Policía Nacional los estaba persiguiendo, se bajaron y emprendieron una nueva huida. Finalmente fueron capturados.