Cáritas de La Viña se queda "bajo mínimos" para atender a las familias

Son malos tiempos. La falta de empleo y la escasez de recursos económicos parece que no encuentra un punto de inflexión y las dificultades para salir adelante siguen en aumento. Y en algunas zonas o barrios de la ciudad se sufre más que en otras. Posiblemente, uno de los puntos donde se está viviendo esta situación de manera más crítica es el barrio de La Viña. Allí, Cáritas de la parroquia de La Palma se ha quedado ya sin recursos para seguir atendiendo a las familias.

"Estamos bajo mínimos", asevera de Cáritas parroquial, María del Carmen Gámez. Una situación ésta que no se da en otras parroquias o zonas del casco histórico -algo que Gámez conoce de cerca puesto que también es responsable de Cáritas arciprestal de Cádiz Interior-.

Dos son los factores principales que han llevado a Cáritas a esta situación en el barrio de La Viña. De un lado, el considerable aumento de personas y familias que solicitan ayuda de esta organización (más de cien se atienden de manera habitual en los tiempos actuales). Y de otro lado, un descenso de los donativos y otros ingresos que perciben en Cáritas para invertirlos en ayudar a este centenar de familias de la Viña.

En este último sentido, Gámez asegura que la campaña de Navidad que acaba de finalizar ha sido "regular tirando a mal", lo que reduce las opciones de trabajo de este grupo parroquial.

Las principales vías de ayuda de Cáritas son la entrega de alimentos y el pago de recibos de alquiler de viviendas, de agua o de luz. En relación a los alimentos, María del Carmen Gámez indica que subsisten actualmente gracias a los víveres que llegan del Banco de Alimentos y a campañas y donaciones puntuales que llegan de la mano de la hermandad del barrio (La Palma) o de peñas y entidades de la zona. Aún así, también encuentran dificultades en este campo. "Ahora por ejemplo no nos queda ni una gota de leche, siendo ésta una de las cosas que más se demanda, sobre todo por parte de las familias que tienen niños pequeños", comenta.

Pero el principal problema es el económico. Cáritas de La Palma se ha quedado sin euros que destinar a esta otra pata fundamental de su acción (la de pagar o colaborar con el pago de todo tipo de recibos). En concreto, dispone ahora Cáritas de 300 euros que la cofradía de La Palma entregó recientemente. "50 euros lo vamos a dar a una familia para que no le corten la luz; otros 50 euros los destinaremos a otro caso parecido; y los 200 restantes los vamos a reservar para las emergencias que se nos presenten el jueves (que es el día en que se atiende en la Palma a las familias o personas con necesidades y dificultades)".

Pero las demandas de ayuda siguen llegando, y casos de carácter grave -"como un desahucio que tenemos en puertas", explica Gámez- hacen que Cáritas necesite urgentemente fondos.

Para ello, esta organización va a realizar una campaña de captación de nuevos socios, que podrán colaborar entregando un donativo de manera mensual, semanal "o como ellos quieran". Cuotas de simplemente 50 céntimos o 1 euro son suficientes para colaborar con Cáritas. Al margen, este grupo de La Palma se verá obligado a solicitar ayuda al fondo arciprestal (que se nutre de un dinero que entregan mensualmente las parroquias de la recaudación de sus colectas y que se destina, precisamente, a este tipo de emergencias).