El tráfico en los alrededores de la plaza de Sevilla sigue siendo un problema. A lo largo de las mañanas de esta semana, los agentes de la Policía Local están obligando a los coches que acceden al casco histórico por la Cuesta de las Calesas a entrar en la plaza de Sevilla y rodear la fuente para poder continuar el recorrido por la avenida del Puerto.

Para ello, los agentes colocan una especie de pivotes en el suelo que marcan la dirección hacia la plaza de Sevilla. Eso provoca que los dos carriles que bajan de la Cuesta de las Calesas se conviertan en uno, provocando retenciones de tráfico que en ocasiones llegan hasta la principal Avenida de la ciudad.

Este dispositivo está formado por un buen número de agentes de la Policía Local que lo que intentan sobre todo es impedir que los coches que circulan por la avenida del Puerto se desvíen hacia la plaza de Sevilla y tengan que ir para ello hasta las Puertas de Tierra y volver a bajar.

En este sentido, quitan el tapón que en ocasiones se producía en la avenida del Puerto, pero lo trasladan hacia la Cuesta de las Calesas.

Este dispositivo sólo funciona a lo largo de la mañana y en los momentos en los que se produce mayor tráfico, aunque hasta ahora no ha resultado del todo efectivo, porque los líos de tráfico y los atascos se siguen multiplicando en un lugar donde se producen muchos cruces de vías.

En el día de ayer la situación se complicó aún más debido a los problemas de aparcamiento. A las escasas plazas de estacionamiento que hay en la vía pública se unió que los de Canalejas y de Adif tenían el cartel de completo a media mañana. Los conductores que habían llegado al centro se encontraron dando vueltas por los mismos sitios sin poder encontrar un hueco para dejar el vehículo.

El aparcamiento de Adif se está llenando en los últimos días, desde que se cerró el del paseo de Santa Bárbara, y sólo quedan las plazas disponibles para los abonados.