Bodas de plata con precios de 1986

Hostelería Aniversario

El Bar Restaurante Mari y Jose celebra el próximo 17 de febrero los 25 años de su apertura, con platos al coste de entonces · Ese día se podrá pagar en pesetas

Pepe Parrado, al frente, con los camareros con los que empezó y la plantilla actual del Mari y Jose.
Pepe Parrado, al frente, con los camareros con los que empezó y la plantilla actual del Mari y Jose.
Pilar Hernández Mateo / Cádiz

13 de febrero 2011 - 01:00

El jueves 17 de febrero, el Bar Restaurante Mari y Jose retrocederá 25 años, hasta el día de su inauguración, el 17 de febrero de 1986. "Lunes después de Carnaval", recuerda Pepe Parrado, propietario del establecimiento.

Para celebrar sus bodas de plata, el Mari y Jose tendrá sus productos a los precios aproximados de 1986. "Serán aproximados porque en aquella época decíamos la carta de palabra y las primeras cartas que conservamos son de principios de los años 90", afirma Parrado, quien añade que el 17 de febrero se podrá pagar en pesetas. Así, ese día, un café costará 75 pesetas (45 céntimos); una cerveza, 80 pesetas (48 céntimos); y por un menú se podrá pagar 350 pesetas (2,10 euros). El menú constará de tres platos de primero a elegir uno, tres de segundo a elegir uno, postre, pan y bebida incluida. Entre los primeros platos, habrá un potaje, arroz y un guiso. Entre los segundos, pescado de mercado, carne en su jugo y huevos fritos con chorizo. Los postres serán caseros y también habrá fruta. "Por la noche tendremos una carta especial con los precios de hace 25 años. Y a las horas punta de comida, pasaremos bandejas con degustaciones a los clientes", señala el propietario.

Pepe Parrado se ha reunido con su hermano Pedro y su cuñado Jesús, con quienes abrió el Bar Restaurante Mari y Jose hace 25 años, para recordar aquella época. "Era un local de 40 m2 y hoy tenemos 120m2. La idea era trabajar yo solo, pero desde el primer día me ayudó mi mujer en la cocina y mi hermano y mi cuñado atendían al público. Así que empezamos cuatro personas", rememora Pepe Parrado.

Relata que al principio sólo tenían la barra y dos mesas, y después realizaron varias reformas. "Lo que hoy es el salón, antes era la terraza del bar, que pertenecía a los soportales del edificio. En el año 2000 llegamos a un acuerdo con la comunidad de propietarios e incorporamos los soportales al bar, y así pasamos de 40 a 20m2". La terraza actual la tienen en la calle Tarsis, que es peatonal, en la que han colocado una marquesina con 12 mesas.

"Mucha gente y muchos nervios", eso es lo que recuerdan de su primer día. "Vino muchísima gente y nos cogió de sorpresa. Hasta nos faltó material. Se sobrepasaron todas nuestra previsiones".

Empezaron con cuatro tapas básicas: caracoles, cabrillas, carne en su jugo y carne mechada con limón. Después fueron incorporando más platos, pero estos cuatro siempre fueron los más demandados y hoy los siguen teniendo. De hecho, ellos se enorgullecen de ser un punto de referencia en los caracoles, junto con el Nebraska y La Noria.

El Mari y Jose abre todos los días del año, excepto Navidad y Año Nuevo, sirviendo desayunos, aperitivos, comidas, meriendas y cenas. La plantilla actual es de 8 personas en invierno y hasta tres más en temporada alta. Su clientela habitual son personas que acuden al colegio Salesianos -que está en frente- y a las oficinas de alrededor. "Los fines de semana nos visitan muchas familias de toda la ciudad y en época de caracoles viene gente de todo Cádiz y de distintas ciudades de la provincia", comenta el propietario.

Pepe Parrado ha estado al frente del Mari y Jose 20 años. Cuando se jubiló, en el año 2006, se hizo cargo el primer año su hijo José, pero lo dejó en 2007 para continuar la carrera de Psicología. Desde entonces y hasta ahora lo dirige su yerno, Antonio Camarena. Parrado está muy agradecido "a todo el personal que ha hecho posible que nos hayamos mantenido a pesar de la crisis, y sin tener que reducir plantilla". Recuerda emocionado a su mujer, "que tantos años me acompañó en la cocina y que nos dejó en 2005", y a Juan Manuel Carrera, "que estuvo con nosotros casi 20 años".

En los últimos años, este hostelero ha creado una sociedad junto con su hermana Milagros, que lleva la cafetería del colegio Salesianos, y su cuñado Jesús Macías, al frente del Restaurante La Glorieta. Además, forman un grupo familiar junto con el Nebraska y La Noria, que regentan dos hermanos suyos. Así, entre los cinco negocios, dan trabajo a unas 30 personas, que aumentan a 40 en verano.

El jueves 17 rememorarán sus comienzos junto con todos los que quieran acompañarles.

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