Después de 19 meses desde que se celebrara la última sesión presencial, los plenos municipales en el Ayuntamiento de Cádiz han vuelto a la casa consistorial. El regreso no ha sido totalmente normalizado, sino que ha venido acompañada de mascarillas en todos los concejales y una separación de más de metro y medio entre cada uno de los ediles.

De este modo, los concejales de Adelante Cádiz han ocupado las dos bandas de los escaños donde siempre está toda la corporación en la sesión plenaria. En el centro, a modo de crujía, dos líneas de mesas enfrentadas donde se situaban los concejales del Partido Popular.

Ya más alejado y en las primeras líneas donde se sentaba el público, había cuatro mesas con dos ediles cada uno del PSOE, Ciudadanos y el no adscrito. Y los periodistas, ocho como máximo,  al fondo del todo. Es una sesión plenaria sin público de la calle y donde todo el que salía y entraba tenía que echarse un gel hidroalcohólico que se encontraba a la entrada del Salón de Plenos.

Asimismo, en este regreso paulatino a la normalidad pero en una fase de transición absoluta, había detectores de Co2 en el salón de pleno, las ventanas estaban entreabiertas y a la una de la tarde estaba previsto un receso de media hora para ventilar el recinto.

El Pleno se ha iniciado con una especie de bienvenida institucional por parte del alcalde José María González ‘Kichi’, que ha enumerado a los miembros de la Corporación las distintas normas que tienen que cumplir de precaución. Kichi ha calificado el Pleno como “especial” y dijo que esperaba que el retorno de las sesiones presenciales “refuerce la concordia y el diálogo, pilares del estado democrático”.

Asimismo, el alcalde tuvo un recuerdo por la memoria de fallecidos por el Covid y por sus familias y envió “un abrazo fraterno” a las víctimas del desastre por la erupción del volcán en La Palma y se vovió, por desgracia. A tener que hacer un minuto de silencio por las mujeres fallecidas por violencia machista.

A partir de ahí, lo primero que se ha aprobado, tras la actas del último pleno, una declaración institucional por los derechos del colectivo LGTBI y contra la violencia hacia estas personas, que era una propuesta del Grupo Socialista pero que se ha convertido en declaración institucional.

En las primeras intervenciones de los ediles, el edil no adscrito Domingo Villero ha tirado de humor y dio u saludo desde “el Fondo Sur” por lo lejos que se encontraba, mientras que Lucrecia Valverde, de Ciudadanos, ha recurrido a lo literario y a Fray Luis de León con aquella famosa frase que dijo en la Universidad de Salamanca tras volver de a cárcel después de varios años: “Como decíamos ayer”…