“Todo lo que dice es una chorrada”. Ramón Patiño Alcántara fue secretario del comité de empresa en la factoría de Astilleros Españoles en Cádiz a finales de los 70, cuando se produjeron las primeras reconversiones industriales. Se refiere de esta manera al relato que hizo hace unos días Jaime Rocha, ex agente del CESID, los servicios de inteligencia españoles, donde dijo que miembros de la KGB soviética estuvieron en Cádiz y alentaron las movilizaciones de la época.

Patiño asegura que perseguían dos fines con aquellas movilizaciones y ninguno era la desestabilización del país: “Por un lado frenar la reconversión industrial porque el futuro iba a ser de una ruina total. Por el otro, la de conseguir mejores condiciones laborales”. El líder sindical de entonces recuerda que “en aquel entonces estábamos muy explotados. Teníamos un sueldo de miseria y las condiciones de trabajo eran muy malas”. Así, pregunta directamente a Rocha “por qué no hace mención a que hubo muchos accidentes mortales y que muchos eran fruto del agotamiento de los empleados”. Patiño incluso afirma que se puso un comedor en astilleros porque había gente “que se desmayaba trabajando porque con el salario no les llegaba”.

Afirma que cuando salían en manifestación lo hacían en base a un mandato de la asamblea y con el permiso previo.Asimismo, recuerda que en el comité de empresa había representantes de Comisiones Obreras, UGT, USO y algunos independientes “pero no había ninguno de la CNT, que podían ser más radicales”. Así, afirma que entre la representación “no había ningún extremista”. Patiño insiste en que lo que se aprobaba en la asamblea era salir en manifestación “no el enfrentamiento con la Policía”.

Patiño también asegura que ninguna persona puede entrar y salir fácilmente de Astilleros, como Rocha decía que pasaba con el agente de la KGB: “El servicio de guardería estaba formado por antiguos agentes de la Guardia Civil y además había otros de este cuerpo que controlaban también las entradas y salidas. Acceder a Astilleros era muy difícil y era imposible que alguien lo hiciera como Pedro por su casa”.

Por todo ello, Patiño quiere recordar la labor de todos los trabajadores de aquella época, muchos de los cuales ya no viven debido a las secuelas de su trabajo en la factoría. Así, afirma con respecto a Rocha que “si lo que quiere es presumir de que ha sido espía del CESID, que coja otro chiste de Jaimito porque con este no cuela”.