Algunas vidas merecen más la pena que otras. Se viven con plenitud y templanza, con la cabeza alta y el camino recto, sin distraerse de la senda fijada. Algunos hombres merecen más la pena que otros, aunque la muerte intente igualarlos al final en una batalla perdida de antemano. Vicente Alonso González, gaditano, viñero, presidente del Cádiz, esposo, padre, abuelo, amigo y un sinfín de calificativos más, fue uno de ellos. Vicente Alonso falleció un domingo de Trofeo, una fiesta que siempre tuvo especial significado para él desde que su primer hijo, el que lleva su nombre, naciera en la primera de sus ediciones. Son muchas las personas que recuerdan con cariño y respeto a este gaditano por su etapa como dirigente del Cádiz. Perteneció a cinco juntas directivas y en abril de 1975 fue nombrado presidente, cargo que sólo ostentó una temporada. Vicente Alonso González padeció en sus carnes los sinsabores del fútbol y, como comentó en una entrevista concedida a Paco Perea en mayo de 2003 y publicada por Diario de Cádiz, "me había prometido a mí mismo que si el Cádiz se mantenía en Segunda me iba; y si descendía a Tercera, seguiría". El Cádiz se quedó en la división de plata pero Vicente Alonso cumplió con su palabra. Esto no quiere decir que abandonara su afición. De hecho, continuó apoyando al equipo y hasta hace pocos años tuvo su palco en el estadio Ramón de Carranza, adonde acudía regularmente con amigos y familiares. El fútbol fue una de sus pasiones, pero siempre tuvo claras sus prioridades. En esa misma entrevista llegó a comentar: "Conocí a Santiago Bernabéu a través de Antonio Calderón. En una ocasión me dijo: mira chaval, el fútbol es un circo y los directivos solemos hacer de payasos, titiriteros o trompeteros. Y añadió: Si alguna vez por culpa del fútbol peligra tu negocio o la familia, abandona. Nadie te agradecerá lo que hayas dado". Dicho y hecho. Vicente Alonso siguió sufriendo por el Cádiz pero no hasta el punto de arriesgar su salud y todo lo que le importaba por el club.

Vicente Alonso González nació hace 86 años en la viñera calle Belén. Su padre tuvo varios locales de ultramarinos hasta que estalló la Guerra Civil. Vicente le ayudaba en sus tareas pero también estudió por libre la carrera de perito mercantil y empezó a hacer sus pinitos en el mundo empresarial. Abrió su primer negocio de distribución en la calle Sacramento, 35, al que siguió otro en la plaza Viudas. En 1952 creó la empresa de almacenista mayoritario Vicente Alonso SL y se trasladó a unos recién adquiridos almacenes de la Zona Franca. En esos años también llevó para la provincia la representación de whisky Dyc y Pescanova, trabajó con Vegé hasta que ésta creó su propia marca y fue entonces cuando montó Agrumasa, una asociación de distribuidores de toda Andalucía que dio pie posteriormente a otra a nivel nacional.

Después su empresa entró a formar parte del Grupo IFA y Serodys. Actualmente Vicente Alonso SL tiene 10 naves en toda la provincia, además de la central de Puerto Real, y da trabajo a unas 80 personas.

A pesar de contar con 86 años, Vicente Alonso González fue siempre un trabajador apasionado y responsable que hasta hace pocos meses acudía diariamente a su puesto de trabajo mañana y tarde. Querido y respetado no sólo por su familia sino también por sus trabajadores, su desaparición deja un hueco inmenso que costará mucho trabajo llenar. Sus cinco hijos y 13 nietos llevarán con orgullo un apellido que en Cádiz es sinónimo de honorabilidad.

Vicente Alonso González falleció este domingo de Trofeo y fue despedido ayer sin hacer ruido, con discreción, respeto y seriedad, como siempre le gustó hacer las cosas. Su nombre quedará siempre ligado a una de las épocas doradas de esta ciudad.