En los tiempos que corren es fácil caer en el error de confundir zambomba o con otro tipo de manifestación. Evidentemente, ambas comparten escenario y contexto, pero ¿cuáles son las diferencias reales? ¿Qué es y qué no es una zambomba?

Vamos a plantearle con un sistema de puntos, el grado de calidad de la zambomba.

El top del 'zambómetro'

Si cumple estas seis premisas, usted estará en una verdadera zambomba.

• Hay gente usando la zambomba como instrumento y no como elemento decorativo.
• La gente se congrega en torno a un corro.
• Canta y participa todo el mundo, no hay intérpretes ni público que escucha.
• Variedad de letras de villancicos e incluso bulerías de Jerez.
• Espontaneidad y libertad de movimiento de los participantes (cualquiera puede salir a cantar y bailar).
• En ocasiones se ofrecen pestiños y dulces navideños. 

La actuación navideña...

• La zambomba no aparece por ningún lado.
• Hay escenario donde se coloca un grupo.
• Hay megafonía para el grupo.
• Se alternan los villancicos con alguna rumba o tema aflamencado externo a la Navidad.
• La gente tiende a agruparse sin participar, sólo charlan y beben cual botellón.
• Por ningún lado hay dulces ni pestiños