La Junta de Andalucía ha publicado esta semana la segunda convocatoria de las becas salario de 400 euros con las que pretende reenganchar a los estudios a jóvenes de entre 18 y 24 años que abandonaron precipitadamente la formación. Esta beca se puso en marcha el año pasado y la Consejería de Educación ha decidido flexibilizar los requisitos para el próximo curso escolar ante la escasa incidencia que ha tenido la primera convocatoria de 3.000 becas. Según ha podido conocer esta redacción, sólo 54 alumnos (un 1,8%) se han beneficiado de la ayuda denominada Segunda Oportunidad.

Esta beca amplió la oferta de la Junta para reducir el abandono escolar temprano, tras una primera de 600 euros al mes (6.000 por curso) que creó en 2009 para jóvenes con 16 años que al terminar la ESO quisieran seguir estudiando Bachillerato o Formación Profesional. La beca Segunda Oportunidad la anunció el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, en el Debate del estado de la Comunidad del pasado año.

Las modificaciones que ahora se introducen son sustancialmente éstas: las cargas familiares y el desempleo de larga duración pasan de ser un requisito que, de no cumplirlo excluían al solicitante, a un criterio para la baremación.

Así quienes opten a esta beca el próximo curso no necesitarán ser parados de larga duración (es decir, llevar más de 12 meses inscrito en el Servicio Andaluz de Empleo) ni tener hijos a cargo. Estas circunstancias, no obstante, darán más puntos a los posibles beneficiarios.

Fuentes de la Consejería de Educación admitieron a Europa Press que los requisitos eran "demasiado duros" y con "condiciones excluyentes" y explicaron que la convocatoria "piloto" del año pasado "sirvió de ensayo" y "se tramitó con el curso prácticamente en marcha". Se anunció dos meses antes de su aplicación.

El secretario general de Enseñanza de CCOO en Andalucía, José Blanco, valoró que la Junta haya "rebajado" los requisitos de la beca porque, en su opinión, tal y como estaban redactados, eran "muy restrictivos".

Más crítico se mostró el presidente del sector de la Enseñanza de CSI-F Andalucía, Francisco Hidalgo, quien tachó de "muy negativo" el hecho de que Educación no aportase a los sindicatos los datos de la primera convocatoria, aún habiendo sido solicitados. Sobre todo, porque según el representante de este sindicato, cualquier modificación de una orden debe estar justificada con cifras, por malas que éstas sean".