La Policía Nacional detuvo ayer en Jaén a un grupo de seis personas acusadas de favorecer la inmigración ilegal de ciudadanos chinos mediante la tramitación de visados a partir de contratos laborales fraudulentos con empresas españolas. La investigación ha determinado que hasta siete empresas formalizaron, entre los años 2005 y 2014, 82 expedientes de trabajo para 42 personas cuya relación con las empresas terminaba automáticamente justo al año de ser contratadas. En concreto, una de esas compañías había regularizado a 14 ciudadanos de origen chino y, posteriormente, renovado a otros dos de ellos, trámites por los que cada uno de los inmigrantes tuvo que abonar cantidades de entre 8.000 y 10.000 euros.

De nacionalidades española y china, las seis personas involucradas en la red fueron detenidas como presuntos autores de delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, contra los derechos de los trabajadores, de falsedad documental y pertenencia a un grupo criminal. Las pesquisas comenzaron en mayo de 2014 tras recibir la Subdelegación de Gobierno de Jaén un informe en el que se relataba que en el Consulado General en el sur de China, concretamente en la ciudad de Cantón, había llamado la atención la concesión de cinco autorizaciones en menos de un mes para trabajadores extranjeros en puestos de poca o ninguna cualificación. El informe destacaba que las empresas contratantes se repetían y pertenecían a una misma familia. En la operación se practicaron dos registros domiciliarios en Jaén en los que fueron intervenidos equipos informáticos y memorias externas, teléfonos móviles y tarjetas SIM, así como 2.710 euros en efectivo .