El heroísmo de una empleada evita un atraco en Trebujena

No se lo pensó dos veces. Y aunque la había amenazado con un arma blanca de grandes dimensiones, un enorme cuchillo de cocina, lo sorprendió por la espalda, logrando que perdiera el equilibrio y se diera un fuerte golpe contra el mostrador de la tienda al cogerle por las piernas.

Una empleada de un establecimiento de alimentación de Trebujena, el autoservicio Miguel Pazo, ha evitado con su valiente acción que la tienda fuera objeto de robo. Una acción que, a tenor del relato de hechos que sobre el suceso han realizado desde la Subdelegación del Gobierno, cabe tildar de heroica. No en vano el asaltante se plantó en el interior del autoservicio con una prenda de las denominadas bragas de color negro y un gorro ocultándole por completo el rostro. Y no sólo eso, iba armado con un arma blanca "de grandes dimensiones".

El suceso tuvo lugar en torno a las 19,45 horas del pasado lunes, en la referida tienda, emplazada en la calle Sanlúcar de Trebujena. El ladrón, tras amenazar a la empleada con un enorme cuchillo, se abalanzó sobre la caja registradora, para apropiarse de la recaudación.

La mujer, ni corta ni perezosa, le agarró por detrás las piernas, perdiendo el equilibrio el asaltante, que acabó golpeándose fuertemente contra el mostrador, cayéndosele el teléfono móvil al suelo. Sorprendido, puso pies en polvorosa.

Y poco después, por el móvil que quedó en el suelo de la tienda, la Guardia Civil detenía a un sujeto, J.R.A., como presunto autor del robo con intimidación que abortó la heroica empleada del súper.