Defensora del amor a ultranza, Emma García sigue apostando por los sentimientos desde la famosa escalera de Mujeres, Hombres y Viceversa. Un dating show , muy cerca de ser considerado un reality, que hoy celebra su tercer aniversario gozando de muy buena salud, gracias a una audiencia fiel que sigue cada cita o confidencia con devoción y un formato que ha sabido reinvetarse y madurar durante todo este tiempo de emisión. 749 programas por los que han pasado ni más ni menos que 45 tronistas y 900 pretendientes, mostrando sus mejores armas de seducción, y en los que la periodista guipuzcoana se ha entregado al 100% para que triunfe la pasión y el romanticismo.

-Tres años de sensaciones muy intensas, supongo.

-Muchas y muy fuertes. La verdad es que estar al frente de Mujeres, Hombres y Viceversa, y no hablo sólo de mí sino de todo el equipo que lo hace posible, sirve de terapia por la intensidad de los sentimientos que allí se viven.

-¿Qué balance haría de estos tres años de programa?

-Muy positivo. Cuando uno empieza con un proyecto lo que desea es que se prolongue en el tiempo, que avance y madure. Lo hemos conseguido y ahí seguimos, con las mismas ganas del primer día.

-¿Cuáles son los ingredientes de su éxito?

-Si te soy sincera, ni idea. Presentar desde esas escaleras y con un micrófono en mano son dos de las claves, novedosas además, del programa, que han llamado la atención del público desde el principio. Quizás el secreto está en la pasión que ponemos en que todo salga bien, esto es una larga cadena de trabajo en la que nos lo curramos, nos esforzamos y también nos divertimos, que eso es muy importante y se nota. Nos preocupamos mucho de que todo salga bien.

-Y cuando hay tanto trabajo de por medio, ¿qué le diría a las personas que piensan que todo está preparado o es un montaje?

-Entiendo a las personas que desde su casa no dan crédito a lo que ven e incluso piensan que todo es mentira. En M,HyV pasan cosas que no nos esperamos ni los que trabajamos allí. Empezamos con una escaleta y a partir de ahí todo fluye por sí mismo, surgen mil situaciones desprevenidas que cambian el curso de todo. Pienso que nuestro público ha superado la idea de que todo es mentira porque se notaría. De hecho, ese factor sorpresa del programa es una de las cosas que más gustan a la gente que nos sigue. A mí, como profesional, no me compensaría mentir a la audiencia cada día. El programa es real al 100%, otra cosa es que las personas que se deciden a participar no nos sean sinceros, y es una pena.

-¿Cree que los famosos bolos están haciendo daño al programa?

-Pasar por Mujeres, Hombres y Viceversa es un chollazo. Te pagan por estar conociendo a gente, te salen bolos... Es un privilegio que muchos no valoran ni aprovechan. Por el plató han pasado personas legales y otras que no lo eran tanto. Yo siempre lo digo: ésta es una oportunidad única que hay que exprimir. ¿De qué les servirá mentir si siempre les acabamos pillando?

-En M,HyV triunfa el amor, aunque tímidamente. ¿Por qué?

-Las relaciones son como la vida misma, pueden llegar lejor o no. Nosotros no forzamos nada, ésta es una forma más de conocerse.

-Son chicos y chicas de revista, ¿realmente les hace falta ir a la tele para encontrar a alguien?

-Es una experiencia más, y créeme si te digo que muchos de los que vienen ni se imaginan lo que pueden llegar a encontrar aquí. Igual no les hace falta pasar por la tele para ligar, pero cuando salen lo hacen mucho más. Lo dice una que lo ve todo desde un lugar privilegiado. Desde mis escaleras he visto tantos gestos, detalles , idas y venidas, anécdotas y sentimientos que es difícil no estar enganchada.