La fuga de Yusef M.L, más conocido como ‘el Pastilla’, tuvo lugar el pasado 23 de diciembre, cuando este joven de 21 años y de origen ceutí, lograba sortear los controles de seguridad de la cárcel de Alcalá Meco, en Madrid, y salir tranquilamente de prisión.  

El fallo estuvo en que los funcionarios y los agentes que custodiaban la salida del penal lo confundieron con uno de los familiares que ese día, y con motivo de la Navidad, habían acudido a visitar a los reos.

Desde entonces la Policía lo ha estado buscando, especialmente en la zona del Estrecho, ya que se trata de un delincuente peligroso acusado de haber matado a dos hombres y que, además, está amenazado por uno de los clanes de la droga que controlan la ciudad de Ceuta.

Control en el Estrecho

Por este motivo, nada más conocer la noticia de su fuga, se montó un amplio dispositivo que controlaba la zona de Algeciras, el Estrecho y la costa marroquí, ya que las primeras hipótesis apuntaban a que iba a tratar de huir por ahí. Gracias a este control los agentes pudieron comprobar que ‘el Pastilla’ no había atravesado esta zona y que, por tanto, o bien seguía en territorio nacional o bien había huido hacia Europa. 

Relaciones en el extranjero

De este modo los agentes, mientras que los agentes trataban de dar con su paradero, también investigaban, muy de cerca, a sus familiares, controlando sus movimientos y las posibles relaciones que éstos tenían con otras personas en el extranjero. De esta manera localizaron a una familia, conocida de ‘el Pastilla’ que vivía en Alemania.

Lo graban en Montpellier

La primera pista que se tuvo del paradero de ‘el Pastilla’ llegó desde Francia, cuando unas cámaras lo captaron en Montpellier. Cuando la Policía francesa localizó las imágenes, las enviaron a la Policía Científica en España, que pudo confirmar que se trataba de Yussef. Fue entonces cuando comenzaron a seguirle el rastro en su viaje hacia Alemania. 

Lo hospedan en Colonia

La Policía alemana consiguió localizar al reo fugado en Colonia, concretamente hospedado en casa de una familia a la que ya estaban investigando porque la Policía sabía que tenía relación con el ceutí y que habría actuado como cómplice.

Para comprobar que se trataba de él, en esta ocasión, cotejaron las huellas del presunto preso con las que tenían en España. Cuando confirmaron que se trataba de él, lo siguieron hasta poderlo detener en una estación de tren de Leipzig, también en el país germano.

Tras el arresto, Yussef volverá, previsiblemente, a un centro penitenciario en España que cuente con más seguridad que la cárcel de Alcalá Meco, de la que consiguió salir haciéndose pasar por un familiar y teniendo la suerte de su lado al encontrar algunas puertas del penal abierta que le permitieron su huida.