Desde que en el año 2014 tuviera que cerrar sus puertas la Capilla de la Aurora, sede canónica de la hermandad, por las deficiencias estructurales que presenta el edificio, el convento del Espíritu Santo se ha convertido en la segunda casa de la Humildad y Paciencia.

Este año la hermandad del Nazareno, que hasta ahora salía de madrugada, cumplió con el protocolo de pedir la venia a la hermandad de la Humildad y Paciencia, un acto que se ha celebrado por primera vez, antes de la salida procesional, por el cambio de hora de la procesión del Nazareno, que pasa a desfilar ya el Jueves Santo.

A las cuatro y cuarto de la tarde tocaron las puertas de la iglesia del convento y los hermanos del Nazareno fueron recibidos por el hermano mayor de la Humildad, concediéndoles la venia y deseándoles una buena estación de penitencia.

Nuestra Señora del Desconsuelo, en el momento de la salida a la calle Espíritu Santo.

Cada año es un espectáculo contemplar la salida del Santísimo Cristo de la Humildad y Paciencia y del Palio por la angosta puerta de la iglesia, donde en la plaza que se abre ante la explanada de Pozos Dulces le esperan los fieles. Un año más no ha sido posible disfrutar de este espacio restaurado, por lo que el recorrido discurrió  de nuevo hacia la calle Espíritu Santo y después por Albareda.

La bellísima talla del Cristo iba acompañada este año de tres figuras, las de Barrabás y Martillo y la de uno de los centuriones romanos del conjunto, una vez que ha sido restaurado por el artista portuense Daniel Herrera y la tarifeña Blanca García. El plumaje y la capas del romano han sido confeccionados por las  camaristas de la hermandad.  Lucía también al sol el nuevo dorado del frontal del canasto del paso de misterio. Velas y flores moradas completaban el conjunto del paso del Cristo, cuya maniobra de salida fue muy celebrada por el público.

Las hermanas del Espíritu Santo, en el convento.

Tras la salida del Cristo lo hacía el palio de Nuestra Señora del Desconsuelo, entre los cánticos de las hermanas del Espíritu Santo. 

El paso de Misterio iba acompañado por la Banda de Cornetas y Tambores Rosario de Cádiz, mientras que el paso de Palio lo hacía junto a la Banda de Música Arunda de Ronda (Málaga).

Mujeres de mantilla acompañaban también el recorrido, dentro de la iniciativa del Consejo Local de Hermandades y Cofradías de impulsar esta tradición en El Puerto.

Al cierre de esta edición numeroso público esperaba el paso de la hermandad por lugares emblemáticos de su recorrido, como la calle Zarza, la Placilla o la Plaza de Abastos.