Hasta 72 usuarios de la residencia de mayores de la Cruz Roja en San Fernando se han visto afectados por el coronavirus desde que se diagnosticó el primer caso -el pasado 23 de marzo- hasta que la semana pasada, tras la realización de las oportunas pruebas, se confirmara que los últimos residentes contagiados habían superado el virus y la residencia, que había estado medicalizada por el SAS para poner el brote bajo control, empezara a recuperar la normalidad. 

El dato, en un centro que daba cabida a 158 mayores, supone el 45,6% de los residentes; una cifra especialmente elevada que ha convertido a esta residencia en el foco más preocupante de contagio que se ha dado en la localidad isleña y que, sin duda, ha contribuido decididamente a las elevadas estadísticas que ha registrado San Fernando, la segunda ciudad de la provincia en número de contagios.

Los afectados de la Cruz Roja, de hecho, equivalen al 34,8% de todos los casos que se han registrado en la ciudad, que se sitúa a la cabeza de las localidades situadas en el entorno de la Bahía. 

No obstante, a pesar de esa preocupante cifra y a pesar de que los mayores se tratan de uno de los colectivos más vulnerables al virus, la crisis del coronavirus que ha vivido la residencia isleña se ha solventado con el 87,5% de pacientes curados, lo que no deja de ser un buen resultado. 

Hasta 63 de los 72 usuarios que se han contagiado han conseguido superar el Covid-19 y han sido dados de alta, lo que se atribuye a la intervención llevada a cabo con la medicalización de la residencia, a la adopción de medidas preventivas para frenar los contagios y al trabajo conjunto llevado a cabo por los profesionales sanitarios y coordinado por especialistas de Medicina Interna del hospital de San Carlos, que se han encargado de la supervisión de los casos y de controlar su evolución hasta solventar la crisis.  

El coronavirus, lamentablemente, se ha cobrado la vida de 9 residentes, lo que supone un 12,5% de los casos registrados en el centro en estas duras semanas. En estos días se han registrado también otros fallecimientos en el centro, aunque por patologías ajenas al Covid-19. 

Desde la propia residencia de San Fernando se conocía hace unas semanas que habían sido "semanas muy díficiles" y que el virus había "impactado duramente" en el centro. También se reconocía el buen resultado que había dado el modelo de medicalización de la residencia desde el SAS, que -afirmaba- "había demostrado su eficacia". 

A los casos registrados entre los usuarios se suman los positivos que han dado los trabajadores del centro, la mayoría de los cuales afloró tras la realización de los test rápidos. Hasta 13 casos se contabilizaban hace unas