Los trabajadores de la depuradora aumentarán sus protestas si no hay diálogo

Los trabajadores de la estación depuradora de aguas residuales (Edar) de Cádiz y San Fernando se han manifestado ante las puertas de Aquagest Sur para denunciar la falta de voluntad de la empresa para sentarse a negociar un nuevo convenio que mejore las condiciones del colectivo, que tachan de "precarias". La protesta contó con el apoyo del secretario de Organización de UGT de Cádiz, Antonio López, y del secretario general de la Federación de Industrias Afines del sindicato en Cádiz, Gustavo Vargas. Desde la empresa se recuerda, por su parte, que forma parte de una Unión Temporal de Empresas (UTE) que es la encargada de gestionar la depuradora.

Los trabajadores de la Edar critican que llevan dos años intentado abrir un periodo de negociacion que amplíe el convenio "de mínimos" al que están adscritos y que equipare su situación a la de los trabajadores de otras depuradoras de la provincia, con los que están en clara desventaja salarial. Desde UGT se han presentado hasta seis plataformas de convenio que la empresa ha rechazado.

En un comunicado, la empresa señalaba que aunque cada empresa integrante de la UTE tiene sus convenios para cada uno de los centros de trabajo, el convenio de ampliación en la Edar es el convenio colectivo estatal del agua. De hecho, actualmente se negocia en Madrid el nuevo convenio colectivo, por lo que Aquagest recuerda que hasta que no finalicen las negociaciones no se puede conocer el resultado final y el grado en que se verán recogidas las demandas efectuadas por los trabajadores. Tanto las empresas a nivel estatal como los sindicatos mayoritarios están representados en esas negociaciones, señala.

Las críticas de UGT parten de que once trabajadores deben cubrir en turnos de dos personas los 54.000 metros cuadrados de la depuradora los 365 días al año, las 24 horas del día. "A pesar de trabajar de noche y en festivos, los sueldos son de mileuristas y en condiciones totalmente precarias", lamenta uno de los delegados de UGT, Juan José Guerrero. Una hora nocturna de trabajo cuesta a la empresa, continúa, 1,36 euros. Y eso que se factura a los ayuntamientos por metro cúbico depurado. "No puede alegar crisis como está haciendo, puesto que los ciudadanos pagan debidamente la tasa de depuración", insiste en sus explicaciones.

Pero además los operarios denuncian precariedad en las condiciones de trabajo. En primer lugar, no tienen medios mecánicos, por lo que todo lo realizan de manera manual. Además, no se ha cubierto la baja de un compañero desde el pasado diciembre.

Ante la postura de la empresa de no atender las peticiones de los trabajadores de la depuradora y sentarse a negociar un acuerdo laboral, el sindicato UGT, por medio del secretario general de la Federación de Industrias Afines de Cádiz advierte de que las protestas se intensificarán.

Desde Aquagest se insiste en que no gestiona de manera directa la depuradora, y que por tanto no son trabajadores adscritos a sus convenios.