La residencia de mayores de Cruz Roja en San Fernando sigue apostando por la música como recurso terapéutico, con sesiones de musicoterapia para los residentes y están obteniendo "muy buenos resultados", al mejorar el estado de ánimo pero también la función cognitiva global y la calidad de vida de estas personas. Ahora se da un paso más con un taller adaptado para residentes con alzheimer.

Los buenos resultados han hecho que el centro haya querido avanzar y plantea un taller de musicoterapia que estaría reservado para sus usuarios con alzheimer y para quienes tienen algún tipo de deterioro cognitivo en sus distintas etapas de evolución: temprana, intermedia o avanzada.

Los estudios, argumenta la entidad, muestra que la capacidad de cantar canciones relacionadas con experiencias pasadas de las personas con alzheimer se mantiene hasta estadios finales de la enfermedad, ya que las redes neuronales musicales que implican la memoria y el reconocimiento musical, el canto, la ejecución instrumental o la capacidad de componer son independientes de otros procesos cognitivos, como la memoria episódica o el lenguaje, aunque están íntimamente relacionados entre sí. De esta forma, personas con demencia en estadios avanzados pueden recordar canciones familiares. La música, insiste la residencia de mayores de Cruz Roja, evoca recuerdos y con ellos emociones que influyen en nuestro sistema nervioso autónomo, estimula el funcionamiento cognitivo y activa el cerebro.

La entidad explica que la música puede servir para potenciar las relaciones de la persona afectada con su entorno, facilitar la tarea del cuidador y ofrecer un elemento de conexión con sus familiares. Por eso hacen partícipe a los familiares, para que puedan compartir un rato de música juntos, o cantar o bailar.

Tres talleres de musicoterapia activa

El taller se compone de tres talleres: de ritmo con objetos con el que potenciar la actividad neuronal; de canto expresivo, ya que trabajar con canciones potencia la actividad neuronal y ofrece un estado de ánimo de bienestar y ensoñación; y el taller de baile y movimiento, haciendo del baile un buen método para hacer ejercicio creativo y dinámico.