El proceso para el cambio de titularidad del hospital de San Carlos de Defensa al Servicio Andaluz de Salud (SAS) continúa sin novedades para los interesados, especialmente en lo que se refiere al personal y a los trabajadores de las empresas auxiliares (que siguen prestando servicio y aquellos trabajadores que están desde hace unos meses en la calle).

Nada se sabe de esta tramitación a pesar de las insistencia de muchas partes por conocer más detalles. Ahí está el "silencio administrativo" de la Subsecretaría de Defensa a las impugnaciones que hizo la comité del personal laboral de Defensa en la provincia del contenido del protocolo de transferencia del personal y las instalaciones y del proceso para cubrir las plazas de la nueva Clínica Militar. "No se han dignado a responder, como ya es habitual, porque sistemáticamente no nos contestan a nada", comenta el presidente del comité, Alberto Pablos. Cumplido el plazo estipulado de un mes hace más de dos semanas, los representantes sindicales tienen desde entonces dos meses para presentar su demanda por lo contencioso. "Seguimos adelante con nuestros planes, pero estamos aguardando a que salga el listado provisional del proceso de estatutarización, así como de la dotación de personal civil para la clínica, para así incluir todo en la demanda. Estamos esperando el momento propicio", explica. La relación de personas que irán a la clínica militar, añade, ya debería haber salido por lo que cree que Defensa lo tiene retenido.

Mientras tanto responsables del comité sigue acudiendo a las protestas que cada miércoles protagoniza la plataforma Los Olvidados de San Carlos, que integran los trabajadores de las empresas auxiliares que siguen sus tareas en el hospital, pero sobre todo aquéllos que han ido perdiendo su trabajo por la reducción o finalización de los contratos. En total eran aproximadamente un centenar. Ahora unos 24 están sin empleo después de muchos años, en algunos casos, desarrollando un trabajo en San Carlos. Los contratos que expiraban a finales de marzo, referidos a jardinería y a trabajos de administración, han sido renovados para un periodo de uno a dos meses, lo que es una cuestión positiva en las circunstancias de incertidumbre en que se mueven.

A pesar de esto, tampoco saben mucho sobre un futuro más profundo, sobre la posibilidad de que sean subrogados por las nuevas empresas a las que se adjudiquen los servicios una vez el centro hospitalario cambie de manos. "El alcalde me informó que había puesto sobre la mesa la situación de las empresas y los trabajadores en la reunión que mantuvo en Madrid hace unos días. La idea es que esto se trate en la cita que pronto tendrán Defensa y el SAS [la comisión paritaria, según comunicó el alcalde]. Es un paso más, pero necesitamos la buena voluntad de las administraciones", manifestó ayer a la puerta del hospital la portavoz de este colectivo, Silvia Bello.

A los convocantes los acompañaban otros colectivos vecinales, y la nueva plataforma social La Otra Cara de La Isla, que defiende la importancia de luchar por la ciudad. El primer secretario local del PA, Francisco José Romero, lamentó de nuevo la falta de noticias sobre el proceso, especialmente cuando quedan pocos días para que finalice el plazo para que el SAS asumiera el hospital. "El protocolo contempla una prórroga y la falta de información nos hace temer lo peor porque esto dilata la incertidumbre que viven muchas familias. Esperemos que no sea así", finalizó.