"Contribuir al progreso moral y material de los obreros de esta ciudad, a fin de estos sean ciudadanos dignos, útiles, inteligentes y laboriosos, tanto en sus relaciones con la familia como con la sociedad en general". Con ese objetivo se creó en SanFernando el Centro Obrero en 1884.

Hoy, la institución no religiosa más antigua que tiene la ciudad está de aniversario. Cumple la fecha redonda de 135 años volcado en la formación y siendo todo un referente histórico vinculado a la Armada, al Arsenal de La Carraca, a la antigua Bazán, a la desaparecida Fábrica de San Carlos y cubriendo con éxito una faceta a la que a menudo no llegaba la administración. Generaciones de isleños han pasado por sus aulas para aprender dibujo técnico, mecanografía, taquigrafía... Inevitablemente, el Centro Obrero forma parte de La Isla y de su historia.

Basta recordar una de sus anécdotas más conocidas: en uno de sus viejos libros de actas se da cuenta del agradecimiento de Isaac Peral y Caballero "por la colaboración prestada por los alumnos del centro en la confección de los planos y por los obreros socios que trabajan en el Arsenal ante el éxito obtenido en las pruebas oficiales del submarino de su invención".

Y esa vocación sigue muy presente de la mano de su presidente, Juan Coello Cruz, al igual que el legado del legado histórico de su padre –Juan Coello Sánchez, Hijo Predilecto de la Ciudad– que durante las décadas del siglo XX hizo que esta institución viviera sus años más gloriosos. Hoy, el Centro Obrero sigue al pie del cañón con unos 150 alumnos e impartiendo clases de informática, gestión empresarial, ordenografía, diseño gráfico, fotografía...